Las fuerzas de seguridad portuguesas intervinieron 60 kilos de explosivos, mayoritariamente pólvora y dinamita, así como 50 metros de cordón detonante y 215 armas de fuego en el último año en diferentes localidades de los municipios de Chaves y Montalegre, limítrofes con la provincia de Ourense.
Las intervenciones más recientes fueron esta semana. Los agentes decomisaron una escopeta a una mujer de 65 años en Chaves y dos pistolas a un vecino de Montalegre.
Entre el armamento decomisado predominan las pistolas, escopetas y revólveres, pero también hay un lanzagranadas y cinco fusiles.
Las incautaciones se enmarcan dentro de la investigación que tienen en marcha la Guardia Nacional Republicana portuguesa y la Guardia Civil para combatir el 'contrabando' de armamento y explosivos en la franja fronteriza.
Durante el mismo período y dentro de la misma investigación, la Guardia Civil decomisó 17 armas de fuego (pistolas y escopetas), parte de ellas a conductores portugueses cuando circulaban por las carreteras de Verín, Baltar, Xinzo y Calvos de Randín. Los agentes se las intervinieron al carecer de autorización. La Guardia Civil también se incautó de medio kilo de pólvora.
Entre el armamento decomisado predominan las pistolas, escopetas y revólveres, pero también hay un lanzagranadas y cinco fusiles.
Las incautaciones se enmarcan dentro de la investigación que tienen en marcha la Guardia Nacional Republicana portuguesa y la Guardia Civil para combatir el 'contrabando' de armamento y explosivos en la franja fronteriza.
Durante el mismo período y dentro de la misma investigación, la Guardia Civil decomisó 17 armas de fuego (pistolas y escopetas), parte de ellas a conductores portugueses cuando circulaban por las carreteras de Verín, Baltar, Xinzo y Calvos de Randín. Los agentes se las intervinieron al carecer de autorización. La Guardia Civil también se incautó de medio kilo de pólvora.