El acuerdo alcanzado entre la Federación Española de Municipios y Provincias (FEMP) con el Gobierno sigue generando reacciones. Los populares gallegos, encabezados por el presidente de la Diputación de Ourense y miembro de la junta de gobierno de la FEMP, Manuel Baltar, mostraron su rechazo por considerarlo "un ataque ao municipalismo e un ninguneo ás entidades locais".
Los votos a favor de los alcaldes socialistas a la gestión de sus ahorros por parte del Gobierno, con la oposición de PP, Ciudadanos y PdeCat, precisión del voto del presidente de la FEMP, Abel Caballero. Baltar acusó su actuación de "non actuar como o alcalde dos alcaldes de España", sino como un representante del PSOE: "Non é un acordo da FEMP, é unha decisión dos alcaldes socialistas que están nela", afirmó Manuel Baltar durante una rueda de prensa celebrada ayer en la sede de los populares gallegos de Santiago.
La posición de Caballero fue muy criticada por Baltar, ya que su voto permitió la "incautación do aforro dos concellos e das diputacións" en favor del Ejecutivo central. "O que se nos impón é un documento que non aporta nin un só euro ás entidades locais, que reflicte a insolaridade e desgiualdade e que ignora por completo ao mundo rural", destacó Baltar.
El presidente de la Diputación recalcó que la propuesta aprobada no concuerda con las demandas de las entidades locales y considera que vulnera su autonomía: "É unha afronta contra os concellos, aos que sempre se lle permitu investir nos servizos básicos", expresó Baltar. En la comparecencia garantizó que seguirá defendiendo el municipalismo desde "o consenso, o acordo e o diálogo".
A votación en el Congreso
Caballero, como presidente de la FEMP, salió en defensa del acuerdo alcanzando, criticando la actuación de un PP que "no soporta" esta meta alcanzada con el gobierno de Sánchez, a la que califica como un "gran avance". Por otro lado, a los populares los acusa de hacer "pura política partidaria" con su posición.
El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, y Caballero sellaron ayer el acuerdo, con la presencia de la minsitra de Hacienda, María Jesús Montero; y de la titular de Política Territorial, Carolina Darias. Esta propuesta, que por el momento no es válida, la transformó el Gobierno en un decreto ley que se tendrá que convalidar en el Congreso, donde ahora mismo no contaría con la mayoría necesaria para su aprobación.
Los concellos acumulan 155 millones
Los concellos ourensanos acumulan 155 millones de euros de remanente de tesorería que podrían poner a disposición del Gobierno para participar del fondo de 5.000 millones que se pretende a repartir. Así se desprende de los últimos datos definitivos de liquidaciones presupuestarias de las entidades locales que realiza el Ministerio de Hacienda. Es más dinero ahorrado que el que tienen en Lugo (124 millones) y, atendiendo a la población, también de los que tienen en Pontevedra (184 millones) y A Coruña (267 millones). Principalmente es la ciudad, que según la última liquidación presupuestaria cuenta con 123 millones de euros de remanente, la que tiene mayor ahorro, algo comprensible después de seis años sin presupuestos y con gobiernos en minoría, situación que se ha corregido en este 2020.
Otra de las novedades que traerá este acuerdo aprobado por el Gobierno y la FEMP –solo con el apoyo de los miembros socialistas– permitirá incumplir la regla de gasto, que traía de cabeza a muchos concellos ourensanos. De hecho, solo en 2018 hasta 18 concellos se situaron fuera de los marcos que por la ley le corresponderían, lo que les acarreó la obligación de aprobar un plan económico financiero.
