El Concello adquirió a Jolper 295 pantallas de audio con intención de dejarlas fijas en las calles del Centro Comercial Aberto para la sonorización de sus campañas -como la navideña-.
La Xunta había concedido una subvención de 88.131 euros al Concello para la adquisición de este material en dos fases (la segunda no se llegó a realizar). "El material se compró y está almacenado en el Auditorio porque el nuevo gobierno decía que estéticamente no quedaba bien", señala Gómez Villar.
Según un informe realizado entonces por la Concejalía de Hacienda, en diciembre de 2006, en el presupuesto de aquel año no había ninguna partida destinada a este programa, por lo que se incoó un expediente de modificación de créditos en la modalidad de generación de créditos.
Sin procedimiento
Aunque en ambos casos se denuncian presuntas irregularidades en la contratación, Áurea Soto sostiene que este caso "nada tiene que ver con Bedoya (la denuncia por la que está imputada toda la junta de gobierno de 2008)". Y es que, según ella, en Bedoya se investiga si el procedimiento negociado debió de ser publicitado mientras que en éste "no hubo procedimiento". A su juicio, en el caso de la calle había premura por no perder una subvención para una obra "de interés público", algo que no ve en este. La concejala denuncia a toda la junta de gobierno de 2006 en base al argumento del auto judicial que imputa a toda la del 2008 aunque, según dijo, "nunca pensé que en la junta de gobierno haya una responsabilidad solidaria".
