Santa Cruz de Arrabaldo fue ayer sede de un encuentro de confraternización entre los usuarios de las residencias Santa Cruz y As Flores, ambas gestionadas por la fundación San Rosendo. Sobre las 10.45 horas tuvo lugar el primer encuentro, en el que los participantes compartieron un desayuno pensado para unir lazos y tender puentes en el inicio de la Semana Santa, que para los usuarios de estos centros llegó este año un día antes de lo habitual.

El colofón a esta unión tuvo lugar poco después, en torno a las 12.00 horas, con la celebración adelantada de la misa de Ramos. Los usuarios pudieron así retomar unas actividades que la pandemia había puesto en suspenso. Hasta el centro se desplazó un sacerdote que ofició una de las eucaristías más esperadas del año eclesiástico, y bendijo, como corresponde, los ramos que portaban los asistentes.
Después de compartir alimentos, experiencias y subrayar los valores característicos de estas fechas, siempre inundadas de fraternidad, los usuarios regresaron a sus respectivas residencias, con un grato recuerdo del comienzo de esta Semana Santa.