El Concello de Irixo prevé incorporar las firmas que proceden a recoger los vecinos del municipio al informe que trasladará a la Confederación Hidrográfica del Miño-Sil para solicitar la limpieza del cauce del río Viñao a su paso por la localidad.
Mientras la arquitecta municipal redacta el referido informe, los vecinos han distribuido un escrito pidiendo la retirada de la tierra acumulada a consecuencia de los arrastres que origina la lluvia en aquellas zonas en las que se ejecutaron obras para el tren de alta velocidad. Los vecinos pueden firmar en distintos establecimientos públicos como bares y supermercados.
El alcalde, Manuel Penedo, se mostró convencido de que la práctica totalidad del pueblo apoyará la reivindicación, debido a las inundaciones que se producen. El regidor se refería a que en un mes ya se se ha desbordado el río en dos ocasiones anegando bajos cercanos y una gran parte del área recreativa de las riberas del Viñao. Aunque la empresa concesionaria de las obras del AVE había realizado una limpieza hace aproximadamente tres años, con el paso del tiempo se ha ido acumulando más tierra, que ya sobrepasa un metro de altura, según ha podido comprobar el concello. Las autoridades calculan que los trabajos se deberán realizar en un tramo mínimo de 50 metros para evitar nuevas inundaciones y los consiguientes perjuicios que ocasionan. No obstante, son conscientes que deben contar con la autorización y también con los medios que no tiene el concello.
El alcalde, Manuel Penedo, se mostró convencido de que la práctica totalidad del pueblo apoyará la reivindicación, debido a las inundaciones que se producen. El regidor se refería a que en un mes ya se se ha desbordado el río en dos ocasiones anegando bajos cercanos y una gran parte del área recreativa de las riberas del Viñao. Aunque la empresa concesionaria de las obras del AVE había realizado una limpieza hace aproximadamente tres años, con el paso del tiempo se ha ido acumulando más tierra, que ya sobrepasa un metro de altura, según ha podido comprobar el concello. Las autoridades calculan que los trabajos se deberán realizar en un tramo mínimo de 50 metros para evitar nuevas inundaciones y los consiguientes perjuicios que ocasionan. No obstante, son conscientes que deben contar con la autorización y también con los medios que no tiene el concello.
