IMPUESTOS

La revisión catastral 
en el rural aumentará el IBI hasta en un 10%

<p></p>
photo_camera José Diéguez y Jacobo Feijóo, durante la rueda de prensa de ayer en la sede de UGT.

Galpones, naves o bajos-almacén también devengan ahora impuestos

La revisión catastral que desde el año 2013 se está llevando a cabo en el rural, tanto en lo que se refiere a la contribución urbana como a la rústica, puede multiplicar "hasta por 10 el recibo del IBI en algunos casos", avisan desde Unións Agrarias.

Según explicó ayer Jacobo Feijóo, responsable de desarrollo de Unións Agrarias, "en la provincia de Ourense ya hay 27 concellos adscritos que han realizado esa revisión catastral y otros 20 que están en proceso", a los que, según las previsiones del sindicato, se unirán en breve los otros 45 que restan.

Este proceso se inicia con el aviso de que hay que pagar una tasa de 60 euros por cada propiedad, pero, según subrayan desde Unións Agrarias, "el proceso no termina ahí", porque a partir de ese momento hay una nueva valoración catastral, actualizada, "con lo que una persona que en urbana pudiera pagar a día de hoy 50 euros, es muy fácil que en el recibo del año que viene tenga que abonar 200 o 250", señaló Feijóo.

A esto se añade la circunstancia de que "puede aplicarse recargo por los últimos cuatro años", en caso de no haberse informado de posibles obras en la propiedad, "con lo que el año que viene podría recibir un recibo extraordinario de hasta 1.000 euros".

Por otra parte, en lo que afecta a contribución rústica, esta revisión catastral incluye en el recibo diversas propiedades que hasta el momento no se contemplaban prácticamente, como galpones, naves o bajos utilizados como almacenes, con lo que "una granja que esté valorada por catastro en 100.000 euros, si el concello de turno le aplica el 0,9 %, pasaría a tributar 900 euros al año". Por esta razón, desde el sindicato agrario piden que "se aplique el coeficiente mínimo, del 0,3 % y con bonificaciones del 80 o el 90 %, con lo que habría que pagar algo asumible, 50 o 60 euros".

El alcalde de Allariz, Francisco García (BNG), reconoce que el mayor problema "ten sido o feito de que explotacións que anteriormente non pagaban polas súas naves, pasaron agora a ser dadas de alta". García reconoce que "nós coñecemos algún caso aquí no que a valoración catastral, allea ao concello, é excesiva" y en este sentido considera lógico apoyar a estos propietarios en sus alegaciones sobre esta valoración. Por otra parte, estima que "é necesario que as propiedades catastrais estean regularizadas; é máis xusto".

Pros y contras

En el mismo sentido se expresa el regidor de Cualedro, Luciano Rivero (PP), que entiende que "é unha normativa europea" y reconoce que "ós veciños lles costa pagar", pero que mientras hay casas nuevas regularizadas catastralmente, otras, construidas hace años y sucesivamente reformadas, no habían tenido esa revisión de los servicios adicionales (piscinas, gallineros, etcétera), por lo que considera que esta revisión "é o máis democrático", aunque matiza que "si alguén tivera problemas para afrontar o pago, no concello estamos abertos a axudarlle".

Desde la Federación Galega de Empresas Inmobiliarias, Benito Iglesias señala que "valorar con fines tributarios un inmueble por encima de su valor de mercado, supone gravar una riqueza ficticia o inexistente, y más en una Comunidad como la nuestra, con las propiedades devaluadas en torno al 30% en los últimos siete años".

Te puede interesar