“La subida de impuestos afecta sobre todo a la clase media"

Los Presupuestos Generales del Estado que el Gobierno prevé aplicar en el 2021 contemplan una subida de impuestos que, salvo excepciones, han levantado polvareda. Tampoco en Ourense han encontrado eco entre los perfiles técnicos, sobre todo economistas. La previsión es subir el IRPF, el impuesto de patrimonio, el de sociedades, los tributos del ahorro, el aumento de la fiscalidad al diesel —en negociación política en la actualidad— así como la modificación de las primas de seguros (entre otros) han provocado reacciones de contrariedad. Carmen Sampayo, decana del Colegio de Economistas de Ourense, cree que esta subida "afecta directamente a la clase media". Por un lado, lo percibe en la modificación en la reducción del IRPF de los planes de pensiones, "que afecta a la única deducción importante que le quedaba a la clase media en su impuesto sobre la renta desde la desaparición de la deducción por inversión en vivienda habitual, perjudicando así a los pequeños ahorradores". Pero, además, aprecia que el incremento de gravamen en las primas de seguros "también tendrá un mayor efecto en las clases medias, las cuales suelen recurrir al sector asegurador para proteger su patrimonio ante posibles contingencias". RENTAS DEL TRABAJO Sampayo percibe que las subidas planificadas en el IRPF, relativas al incremento de las rentas del trabajo superiores a 300.000 euros y las rentas del capital a partir de 200.000 euros "sólo van a afectar al 0,17% de los contribuyentes, por lo que la recaudación va a ser limitada". En cuanto a la subida del último tramo del Impuesto sobre el Patrimonio, "me parece una medida simbólica al ser éste un impuesto cedido a las comunidades autónomas y que se encuentra bonificado en muchas de ellas". SIN PLANIFICACIÓN Carlos Díaz, asesor de empresas, reconoce que en este momento se hace necesario "un aumento de la carga impositiva", que permita asumir la actual situación de gasto público. Sin embargo, matiza que "la normativa adolece de una planificación a medio plazo, por la que se contemple desde ya, una nueva retrocesión en la carga impositiva que favorezca la actividad económica". Díaz asume que la opción generalizada en los países de nuestro entorno es la reducción de impuestos, "para favorecer e impulsar así la economía". En sentido contrario aprecia que la presión fiscal y tributaria en España "es ya muy alta, y ahora con esta nueva vuelta de tuerca hará que se resienta la actividad económica, con lo que es por ello que se debería prever desde ya una nueva vuelta atrás en esa carga impositiva". GASTO PÚBLICO Este economista hace suya la tesis mayoritaria de que la situación que se vive por culpa de la pandemia, efectivamente, provoca situaciones límite que empujan a aumentar el gasto público. Pero cuestiona que eso presuponga "inmediatamente aumentar los impuestos". Es partidario de "revisar parámetros de eficiencia y eficacia del personal de los organismos públicos, que será el primer paso para el ahorro público". ¿Y EL EMPLEO? Manuel Todea, miembro del Consejo Asesor del Registro de Economistas Asesores Fiscales del Consejo General de Economistas de España, echa en falta "incentivos a la inversión empresarial y a la reinversión de beneficios para la creación o mantenimiento del empleo ante unas previsiones de incremento del desempleo". No solo eso, sino que cuestiona que se pretenda "incrementar la recaudación con la creación de nuevos impuestos que al final se acaban repercutiendo indirectamente al ciudadano y se sigue sin premiar la generación de valor". Crece la cifra de colectivos que piden moratorias en los tributos La actividad económica sigue en mínimos como consecuencia de la parálisis del consumo y el descenso general de actividad. Pese a que los ingresos de particulares y empresas han caído, el calendario fiscal sigue con sus plazos habituales, salvo casos excepcionales. El sector del gran consumo, sobre todo comercio y hostelería, piden una condonación de impuestos, así como una moratoria en el pago de rentas de alquiler de locales. Esa es una de las propuestas del Centro Comercial Abierto Ourense Centro. Pero también otros colectivos como la Asociación de Emprendedores de Galicia (Ascega) reclama a las administraciones públicas que negocios afectados por las limitaciones derivadas de la crisis tengan una condonación "total" de impuestos y tasas. Además, solicitan una compensación del 75 por ciento de la facturación del ejercicio de 2019.