Tesoros de Ourense | Carballeda de Avia, el secreto de la sierra de O Ribeiro

Dentro de la comarca de O Ribeiro se encuentra una localidad donde se halla el corazón de la sierra ourensana de Pena Corneira: Carballeda de Avia. Su topónimo viene de “carballo”, voz de origen prerromana que designa diversas especies del género “quercus” y la preposición de Avia, que es la denominación de una tierra medieval regada por el río que adquiere el mismo nombre. Todo esto sirve como pista para lo que uno puede conocer a través de los tres caminos naturales que posee el municipio. Grandes bolos graníticos, una villa romana, viejos molinos restaurados y una zona rural de extraordinaria belleza son algunas características de estas tierras donde el cultivo de la vid en los fértiles valles confiere una personalidad propia al paisaje. Las unidades de relieve se enmarcan en el conjunto montañoso de la Dorsal Gallega, divisoria de aguas y límite con la provincia de Pontevedra. Galería | Concellos de Ourense que guardan tesoros Dicha red fluvial atraviesa la localidad. Esta circunstancia ha favorecido la construcción de numerosos molinos para el aprovechamiento de la energía de este recurso natural. Hubo un tiempo en el que el molino de agua fue imprescindible en la vida cotidiana en Galicia. Con el paso de los años, estos edificios nos transmiten la historia de los habitantes de la zona y sus condiciones de vida. La zona comprende tres caminos naturales: el de los molinos, los bolos y de los carballos, todas ellas acondicionadas con infraestructuras para ayudar en zonas de difícil acceso e indicar a los visitantes información relevante para su conocimiento. Ruta dos bolos Acogida por densos bosques y pasando por encima del núcleo de Faramontaos, se llega a un área de descanso situada en un entorno natural surtido de formaciones de bolos redondeados por las fuerzas de la naturaleza. Los tres más destacados son una piedra que se sotiene con otra más pequeña, otra que tiene cara de gato y, por último, la tercera tiene una cara de un hombre, la cual se dice que es la del señor de Veronza. Si se continúa por esta ruta se llega a la ruta de los molinos restaurados (12 ahora en funcionamento), los cuales tienen un área recreativa de Veronza, con una cascada del agua del río Maquiáns donde se encuentra el molino aserradero. Ruta de los molinos Esta es la ruta más conocida de las tres y parte desde el núcleo de Carballeda de Avia hacia al área de descanso de A Veronza, donde se inicia la ruta. Durante el recorrido, se puede visitar la iglesia de San Miguel, el edificio religioso más notable del municipio, así como la capilla de San Lorenzo. Ya en el área de descanso de A Veronza se localizan 26 molinos restaurados (desde 2007 a 2009), prueba de la importancia que tenía el agua en la vida cotidiana en Galicia, donde estas construcciones no sólo fueron utilizadas por sus propietarios, sino también por el resto de los habitantes de la zona, que pagaban la molienda con una proporción de la harina obtenida, “a quenda”, previamente reglamentada. Desde A Veronza, se emprende el camino principal al borde del regato de Gateira. Atravesando los bosques de ribera, que alternan con zonas de cultivo, viñedo y pinares de pino del país, el sendero discurre cerca del regato hasta alcanzar una carretera. Desde este punto, concretamente a 500 metros de desvío, se puede hacer una breve excursión hasta el núcleo de Muimenta para ver su iglesia románica. Territorio que goza de 26 kilómetros de patrimonio. Continuando por la ruta principal en dirección al Curro del Faro das Laceiras, y dejando el río a la izquierda, se llega a un molino que probablemente es el más antiguo de la comarca. Ruta de los carballos Este ramal, de unos cinco kilómetros, parte del área de descanso de Abelenda hacia el norte, hasta Pena Corneira. Tomando este ramal, después de una pequeña subida, hay un desvío al núcleo de Abelenda das Penas para visitar la iglesia de San Andrés, que llegó a relacionarse incluso con la orden de los Templarios, y en cuyas proximidades se podrá ver un magnífico cruceiro del siglo XVII y un yacimiento romano. Esta villa romana es la única que hay en el Ribeiro y algunas de sus piezas están expuestos en el Museo de Ourense y en el etnográfico de Ribadabia. Si se sigue subiendo se puede ver una bodega que data del siglo IV y V, y el curro donde se suele hacer la Rapa das bestas. Prosiguiendo la ruta, se llega finalmente hasta Pena Corneira (ou o Corno), el enorme bloque granítico de diez metros de altura con forma de cuerno que da nombre a esta sierra y que preside desde lo alto el monumento natural. Desde dicho momumento se ve toda a comarca de O Ribeiro.