'El tren mueve lo que ya está en marcha'

La llegada del AVE es una oportunidad, pero no condición suficiente, para la dinamización socioeconómica de los territorios en los que se asienta, según la geógrafa Carmen Bellet, de la Universidad de Lleida, que ha realizado numerosos estudios sobre esta materia. 'El tren sólo mueve lo que ya está en marcha', indica, pues aporta nuevas oportunidades o potencia lo que ya existe, pero no induce por sí solo fenómenos nuevos.
Los expertos consideran que es necesario 'preparar el camino al tren de alta velocidad' antes de su llegada, comenzando por una adecuada inserción física del AVE en el territorio, negociada por los agentes locales. De hecho, puede generar nuevas oportunidades de transformación urbanística, que han sido claves en el crecimiento de muchas ciudades españolas a las que llegó el AVE, como en Ciudad Real o Córdoba, pero no en otras, como Puertollano. Una buena o mala implantación urbana va a determinar la repercusión socioeconómica posterior.


ESTRATEGIAS

Además de consensuar la integración física, hay que planificar la socioeconómica, lo que requiere 'unas estrategias realistas y una organización adecuada de los actores', sostiene Jaume Feliu, investigador que ha analizado los efectos del AVE en ciudades intermedias europeas, y cita como otro factor clave de éxito la capacidad de liderazgo de los agentes sociales.

Feliu añade que, más que atraer empresas, el AVE dinamiza sectores que generan más valor añadido. Ello requiere acciones de impulso de nuevas dinámicas económicas y sociales, como la creación de suelo e infraestructuras para potenciar el sector terciario, I+D, formación o conocimiento. Asimismo, son necesarios planes que tutelen el desarrollo empresarial y turístico, así como el del área de actividades que surge en torno a la nueva estación. Esa promoción, 'apoyada en la imagen y las prestaciones que ofrece el nuevo sistema de comunicación, es parte del éxito de las ciudades francesas', explica a arquitecta y profesora de la Universidad de Castilla La Mancha Cecilia Ribalaygua. De hecho, en el país galo, ciudades pequeñas con AVE se reorientaron para captar turismo de congresos y crearon departamentos específicos para ello, algo que en España casi no se produjo. Además, estas urbes ubicaron en el entorno de las estaciones equipamientos específicos para congresos.

Te puede interesar