Vecinos del Casco Vello reclaman más intervención policial para evitar botellones nocturnos tras el cierre de bares y pubs. “Hubo ruidos todos los días y el fin de semana solo irá a peor”, aseguran desde la plaza de la Estrella. “Llamamos a la Policía pero tardaron una hora en venir a dispersar a la gente… Increíble”, añaden.
Las fuerzas policiales, por su parte, mantienen el dispositivo especial para frenar este tipo de aglomeraciones nocturnas, que incluye precintado de las zonas más conflictivas, así como la intervención del camión de agua para disuadir a los jóvenes. La plaza del Corregidor, la plaza de la Estrella, la plaza del Trigo, el parque de la Zapatilla o la plaza del Hierro se convierten cada noche en discotecas al aire libre, donde numerosos grupos se reúnen para consumir alcohol e, incluso, escuchar música a “todo volumen”.
Aumento de peleas
Los vecinos de la zona también muestran su preocupación ante el aumento de peleas nocturnas, que se han repetido de forma sistemática cada fin de semana en los últimos meses. Por eso también piden el aumento de vigilancia policial a pie de calle, tanto durante el horario de los pubs como después, cuando los clientes se arremolinan en la calle para continuar la noche al aire libre.
Los locales de ocio nocturno, de hecho, se defienden y ponen de manifiesto que el comportamiento de los clientes está siendo “seguro”. La conflictividad se incrementa después del cierre de los pubs, por lo que los pubs reclaman a la Xunta el aumento de su horario de apertura. Mientras, la asociación O Cimborrio se ha manifestado ya en contra de esta propuesta y reclaman su derecho al descanso nocturno.
