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La vendimia en Ourense se hará en dos fases por efecto de las heladas

photo_camera Vendimia del año pasado en O Ribeiro, que comenzó en la tercera semana de septiembre.

Empezará dos semanas antes que en 2016 en muchas zonas de Ribeira Sacra, O Ribeiro y Valdeorras

 Este convulso año para los viticultores de las cuatro Denominacións de Orixe (DO) de la provincia adelantará las fechas de inicio de la vendimia respecto al año pasado, al menos dos semanas, en O Ribeiro, Ribeira Sacra o Valdeorras. Algunos viticultores comenzarán con la recogida de las primeras clases de uva ya a finales de este mes de agosto. La precoz primavera y el verano seco ha acelerado los procesos de maduración de la uva, por lo que algunos viñedos están casi listos para la recogida, a la espera de las fechas que marquen los distintos consejos reguladores de las DO. 

Además, las heladas caídas durante el pasado mes de abril, que dañaron gran parte de las cosechas, afectarán a la forma de recogida en algunos puntos, como Valdeorras. "Este ano a vendima vai ir desigualada, xa que haberá que facer dúas fases en moitas zonas de Valdeorras, unha coas que resistiron ás xeadas, e outra coas que floreceron despois", señala Daniel Vizcaya, viticultor de 40 años.

En O Ribeiro, el presidente de la Asociación de Colleiteiros Embotelladores, Brais Iglesias, destaca que la vendimia empezará "un par de semanas antes" y que algunos viticultores, siempre dependiendo de la altura de los viñedos, "comenzarán a finales de agosto". No descarta que allí también haya varias fases de recogida. 
Carlos Basalo, viticultor de la zona, destaca que se adelantará "sobre 15 días", y descarta que empiece en el mes de agosto, aunque sí "a inicios de setembro". En cuanto a los efectos de las heladas, señala que "non se recuperou nada". 

En la DO Ribeira Sacra, el presidente del Consello Regulador, José Manuel Rodríguez, ya avanzaba hace dos semanas que la "maduración de las uvas está muy adelantada", por lo que la vendimia podría adelantarse hasta dos semanas antes de lo previsto.

En Monterrei, donde un 90% de viñedos fue afectado por las heladas, los últimas cálculos de la DO situaban el inicio de la vendimia a principios de septiembre. 

MEDIDAS DE LA XUNTA ANTE LAS HELADAS

Ante las críticas recibidas de forma sistemática por los sindicatos sobre la falta de ayudas directas por los daños  de las heladas del pasado mes abril, la Consellería de Medio Rural mantiene que las ayudas directas "non teñen encaixe legal" e insiste en que "o asegurable non é subvencionable", aunque reivindica las medidas tomadas hasta ahora. Desde la Xunta recuerdan que han lanzado una orden de ayudas para reconversión de viñedo, dotada con 1,4 millones  de euros, en la que tienen prioridad las zonas dañadas por fenómenos meteorológicos; además de convocar  una Comisión Territorial de Seguros Agrarios y crear un grupo de trabajo para dar entrada a las DO, además de financiar la contratación de pólizas  con  4,7 millones. Medio Rural también ha anunciado la movilización de 10 millones  de euros para mejorar la liquidez de las explotaciones gallegas, en una convocatoria que, dicen, saldrá en las próximas fechas. 

Mejorar la calidad y ganar prestigio para plantear una subida de precio

Uno de los retos que mantiene el sector vitivinícola en la provincia de Ourense es aumentar el reconocimiento de las marcas con el objetivo de alcanzar en el futuro una subida de precio que ayude tanto a las bodegas como a los agricultores. En Valdeorras, según el nuevo presidente de la DO, José Luis García Pando, "cada vez hai viños de maior calidade, o que é un paso fundamental antes de plantexarse unha subida de prezo". García destaca, eso sí, que "hai bodegas con prezos xa altos e que teñen todo vendido antes de vendimar, e outras con prezos máis competitivos ao que lles queda produto en stock. É unha cuestión de gañar recoñecemento", señala.

El presidente de los colleiteiros de O Ribeiro, Brais Iglesias, dice que "hay una amplia gama de precios" y defiende que "es el mercado el que acaba por dictaminar los precios", pero que hay ribeiros "para todos los gustos", tanto destinados al mercado gourmet como a alimentación. "He pagado por un vino de Luis Anxo en Los Ángeles 170 dólares, lo que demuestra que hay vinos para todos los bolsillos y que los precios se adaptan al poder adquisitivo de la gente".

 El viticultor de O Ribeiro Carlos Basalo dice que "ogallá se poidan aumentar os prezos polo ben de todos" y aventura que los ribeiros tendrán "máis valor engadido" porque cada vez se hacen "máis exclusivos". 

Daniel Vizcaya, de Valdeorras, cree que cada bodega "ten que ter o seu viño caro", aunque señala que "fai falta coller máis prestixio" para poder subir los precios.

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