La Vía da Plata del Camino de Santiago, que tiene en Ourense uno de sus ejes centrales, respira y consigue, tímidamente, remontar el vuelo y ganar peregrinos respecto a los tres años anteriores, pero sigue sumido en un completo estancamiento y es el único de los trazados que no ha conseguido superar este año el récord de visitantes que se había batido en el anterior Año Santo en 2010.
En lo que ha transcurrido de año, incluyendo la primera quincena de diciembre, ha llegado a Santiago de Compostela a través de la Vía de la Plata un total de 9.172 peregrinos, una cifra que todavía se incrementará ligeramente con los pocos que lleguen esta última semana. Estos datos relegan a la vía ourensana a la séptima posición en el ránking del Camino, cuando en el anterior Año Santo era la cuarta ruta más usada.
Esta cifra ha supuesto una pequeña recuperación tras años de caída continua en la recepción de peregrinos, ya que en 2018 llegaban 9.127, en 2017 eran 9.138 los que hacían esta ruta y 9.067 hacían lo propio en 2016.
Tanto la Diputación de Ourense como la Xunta han comprometido inversiones y tienen en marcha proyectos para adecuar la Vía da Plata y conseguir remontar el vuelo, pensando en 2021.
Las cifras de 2019, pese a suponer un pequeño soplo de aire fresco, no dejan de esconder un total estancamiento, ante el empuje de otros trazados muy de moda, como el Camiño Portugués da Costa. De hecho, los casi 9.200 peregrinos de este año se quedan todavía a años luz de los 14.197 peregrinos que llegaron en 2010, el anterior Año Santo.
La excepción desde 2010
Al contrario, el resto de trazados ya han conseguido rentabilizar aquel puntero Año Xacobeo y cierran 2019 con más peregrinos que entonces. Un contraste demasiado grande con la ruta ourensana.
El Camino Francés cierra el año con 189.372 peregrinos, una subida de más de 3.000 respecto a los que llegaron en 2018 y dos centenares más que los que llegaban en 2010.
Crece también exponencialmente el Camino Portugués, que desde hace 10 años ha conseguido doblar el número de visitantes, pasando de poco más de 34.000 a los 72.170 con los que encara el final de este año, y que son también 5.000 mil que en 2018. La subida superior al 100% en la última década confirma la sensación de auge de toda la vía lusa, a la que hay que añadir un trazado, el de la Costa, que en 2010 todavía no estaba activo, y que a cierre de 2019 ha conseguido posicionarse en tercera posición con 22.235 peregrinos, que son casi 10.000 más que el año pasado.
En cuarta posición por número de caminantes se sitúa el Camino del Norte, que cerrará el año, sin embargo, con las mismas cifras o un leve descenso respecto al año pasado (18.988 hasta ahora). Esa cifra confirma, eso sí, que también superan la cifra alcanzada el pasado Año Xacobeo.
Después, cierran el año el Camino Inglés (15.724 peregrinos) y el Primitivo (15.682) también se sitúan por delante de la vía prinicipal de Ourense, ambos con cifras superiores tanto respecto al año pasado como al Xacobeo 2010, cuando registraban la mitad de caminantes en ambos casos.
La Vía da Plata queda relegada a séptima posición entre los trazados preferidos por los peregrinos que visitan Santiago, con casi un centenar más que el año pasado, pero casi 5.000 menos que en 2010.
Camiño do inverno, a mejor
Después se posiciona otra de las rutas ourensanas que empieza a despuntar, el Camiño do Inverno, que con sus 1.026 peregrinos supera con creces a los 703 del 2018 , y alcanzando su mejor cifra histórica.
