El Derrame Rock se despidió de la ciudad acercando a Expourense viejas glorias del rock que demostraron, pese a los años, que están en plena forma. Y el plato fuerte, Los Suaves, reinó como nunca, en un concierto de dos horas.
El pasado sábado la explanada de Expourense acogió el vigésimo aniversario del festival itinerante Derrame Rock, una cita que supuso la despedida del festival en nuestra ciudad, tras un lustro celebrándose en ella. Frente a años anteriores, esta edición se celebró en un solo día y contando con un total de 10 grupos, encabezados en su mayoría por viejas glorias del rock, que pese al paso de los años, demostraron estar en una gran forma.
La jornada comenzó a las 15 horas, con el sol ajusticiando al público presente pese a la carpa que cubría el escenario, pues un fallo de la organización a la hora de orientar el escenario, hizo que la carpa a penas sirviera de cobijo. Pese a ello cerca de un centenar de personas se aproximaron a primera hora para ver al primer grupo, los coruñeses Malasömbra, quienes iniciaron el festival con su potente heavy metal que gustó a los allí presentes y que el grupo no dudó en agradecer. Tras ellos llegaba el turno de la otra banda que consiguió actuar gracias al concurso “Novoson”, Tu mujer nos engaña, una formación de Bandeira que acaba de publicar un cuádruple CD con 40 canciones, titulado “Malas Linguas”. Durante su actuación dejaron al público con ganas de más, pues se trata de una banda con mucho futuro.
A las 16 horas llegaría el turno de los dos grupos locales (además de Los Suaves), Bergallazo y Contra As Cordas. Los primeros desplegaron todo su repertorio de punk-rock, con composiciones propias y versiones de grandes grupos que les influyen. Los segundos presentaron “Invictos” su último trabajo. Seguramente Contra as cordas sea el mejor grupo de estilo hardcore de la provincia y se van haciendo un nombre en la escena gallega.
Más tarde llegarían los de Vigo y luego los de Madrid. De la ciudad vecina actuaron primeramente Aphonnic, un grupo que está logrando grandes éxitos gracias a su último LP, “Héroes”. En el Derrame Rock interpretaron casi todas las canciones de este disco, haciendo botar y vibrar a los asistentes. Los otros vigueses era Siniestro Total, quienes demostraron que aún tienen cuerda para rato y animaron con clásicos de su repertorio como “Miña terra galega”, mezclados con alguna canción de reciente creación como “El chico de ayer”, single lanzado en el 2014.
Rosendo y Burning
De Madrid actuaron dos leyendas vivas del rock, Burning y Rosendo. Los chicos de Johnny Cifuentes se encuentran celebrando su 40 aniversario y según palabras del propio grupo al programa “La Rockipedia” de Telemiño: “Aún tenemos fuerzas para seguir otros 40”. El mítico piano de Cifuentes acompañó a las grandes canciones de la banda.
El incombustible Rosendo comenzaba su actuación a las 21:30, hora en la que miles de personas se congregaban ya en la explanada. El de Carabanchel interpretó todos sus clásicos con gran maestría y acompañado por un público que no le dejó solo en ningún momento. La antigua formación de Rosendo, Leño, también estuvo presente, por supuesto con “Maneras de vivir”, que sirvió para cerrar su actuación.
Sobre las 23:15 horas llegaba el turno para la única formación extranjera: Michael Schenker´s Temple of Rock, la banda del guitarrista alemán Michael Schenker, famoso por haber formado parte de grandes grupos como Scorpions o UFO. El grupo, además, está compuesto por otros dos ex miembros de Scorpions como el bajista Francis Buchholz y el baterista Herman rarebell, acompañados por Doogie White, ex vocalista de Rainbow, y Wayne Findlay. La banda alemana ofreció un gran concierto, interpretando canciones propias junto a grandes éxitos de las antiguas bandas de Schenker.
Pero sin duda el plato fuerte del evento quedaba para el final, Los Suaves, el grupo que ha puesto el nombre de Ourense en el mapa rock nacional e internacional, hacían aparición en el escenario del Derrame Rock, para ofrecer un concierto muy especial encuadrado dentro de su gira de despedida “La música termina”, que será en la que la formación se despida de los escenarios, pero que aún no tiene fecha de finalización, pues la formación se encuentra en un gran momento de forma y así lo demostraron en su ciudad natal.
Dos horas con Los Suaves
Más de dos horas de concierto, nostalgia, agradecimientos, solos de guitarra y un público entregado a Los Suaves fue lo que vivimos. Yosi, Charli, Alberto, Fernando y Tino vieron como todas sus canciones era cantadas palabra por palabra por los miles de fans que se reunieron delante del escenario. Miles de gatos estampados en camisetas es lo que el grupo veía desde su privilegiada posición, y daba igual que interpretasen canciones de hace 30 años o de hace cinco. “Un hombre debe saber cuándo apartarse del mundo”, decía el mítico cantante al iniciar el concierto y el público no dejaba de pedir que no se retirasen, que el rock sin Los Suaves no será lo mismo, y que no queremos dejar de escuchar verdaderos himnos como “No puedo dejar el rock”, “Dulce Castigo”, “Pardao” o “Dolores se llamaba Lola”, que el sábado dejaron afónico a más de uno. La actuación, además, contó con la participación especial de Montxo Costoya, guitarrista histórico del grupo y que sigue ligado a la formación ourensana con la que comparte gran amistad.
