La nieve volvió a hacer acto de presencia en las zonas altas de la provincia, de momento sin causar graves percances pero sí numerosas incidencias.
Ya ayer la nevada que caía en la OU-533, en el Alto do Covelo (carretera de A Rúa a Viana) dejó atrapados 15 coches, que a última hora de la tarde estaban siendo asistidos por agentes de la Guardia Civil de Tráfico. También se produjeron tres salidas de vía de vehículos que patinaron en la calzada -en O Paraño, Baltar y Chandrexa de Queixa- aunque sin consecuencias. Asimismo, a última hora de la tarde era obligatorio el uso de cadenas en los accesos a Cabeza de Manzaneda y en la N-536 en Trives, y se recomendaba precaución en la A-52 en el municipio de A Mezquita. Las distintas pantallas electrónicas que hay instaladas en la autopista a Santiago también advertían de las condiciones meteorológicas adversas.
Sobre las cinco de la tarde, Protección Civil alertó de un recrudecimiento de la situación, aconsejando mucha precaución en las carreteras e informando de que la cota de nieve bajaría durante la noche hasta cotas de 200 y 300 metros dentro de la provincia de Ourense. La capa de nieve, según el servicio de emergencias de Galicia, podría cuajar hoy por encima de los 10 centímetros, sobre todo en las zonas de montaña.
Mientras, los 30 vehículos que tiene operativos la Diputación para combatir las nevadas se preparaban para despejar durante la noche las carreteras y estaban en alerta las 18 máquinas quitanieves del Ministerio de Fomento para abrir camino en la red principal.
La borrasca que comenzó a descargar ayer, llegó acompañada de viento, que en la ciudad derribó tres árboles, uno en la N-120 a su paso por Velle, y los otros dos en Outariz y en la calle Otero Pedrayo. Los bomberos tuvieron que retirar las ramas y cortar los troncos al interrumpir la circulación. La caída de los árboles no provocó ningún incidente entre los viandantes y coches que estaban estacionados.
Sobre las cinco de la tarde, Protección Civil alertó de un recrudecimiento de la situación, aconsejando mucha precaución en las carreteras e informando de que la cota de nieve bajaría durante la noche hasta cotas de 200 y 300 metros dentro de la provincia de Ourense. La capa de nieve, según el servicio de emergencias de Galicia, podría cuajar hoy por encima de los 10 centímetros, sobre todo en las zonas de montaña.
Mientras, los 30 vehículos que tiene operativos la Diputación para combatir las nevadas se preparaban para despejar durante la noche las carreteras y estaban en alerta las 18 máquinas quitanieves del Ministerio de Fomento para abrir camino en la red principal.
La borrasca que comenzó a descargar ayer, llegó acompañada de viento, que en la ciudad derribó tres árboles, uno en la N-120 a su paso por Velle, y los otros dos en Outariz y en la calle Otero Pedrayo. Los bomberos tuvieron que retirar las ramas y cortar los troncos al interrumpir la circulación. La caída de los árboles no provocó ningún incidente entre los viandantes y coches que estaban estacionados.
