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Alimentos congelados versus frescos: ¿cuáles son mejores?

Comida congelada.
photo_camera Comida congelada.

¿Son los alimentos congelados menos nutritivos que los frescos? Así responde la nutricionista 

Un alimento congelado puede ser igual de nutritivo y conservar las mismas características organolépticas que un alimento fresco.

La técnica de congelado mantiene en gran parte las cualidades de sabor y preserva las propiedades nutritivas de los alimentos frescos. La composición nutricional del producto congelado apenas varía respecto al producto fresco, ahora bien, es fundamental manipular de forma correcta, tanto en su congelación, como en su descongelación para evitar pérdidas de nutrientes.

Los procesos que se aplican sobre los alimentos, ya sea antes, durante o después de la congelación del alimento pueden afectar su contenido en nutrientes, especialmente el de las vitaminas. De hecho, el desconocimiento en la manipulación es el causante principal de las pérdidas de estos micronutrientes.

Las vitaminas en los alimentos congelados pueden reducirse por al cambio de temperatura y por aplicar un proceso de descongelación incorrecto. Por ejemplo, en las carnes la mayor pérdida de vitaminas hidrosolubles está dada por la exudación de líquido durante el descongelado, siendo los folatos, la tiamina y la vitamina C, los nutrientes más afectados por un descongelado demasiado extenso.

La comida congelada correctamente conservada y descongelada puede convertirse en un aliado para aquellos que disponen de poco tiempo para la preparación y necesitan una forma rápida de tener alimentos saludables a mano. Aunque se debe tener en cuenta la cadena del frío y no volver a congelar alimentos que ya se descongelaron antes.

Medidas de higiene y manipulación

Medidas de higiene y manipulación para conservar la calidad del alimento congelado:

1.- Seguir las instrucciones del envase una vez vaya a cocinarse.

2.- Descongelar siempre en el frigorífico y después cocinarse.

3.-No superar el tiempo de congelación indicado en el envase.

4.- Mantener en todo momento la cadena de frío hasta su cocinado.

5.- Congelar las carnes siempre limpia y sin huesos.

6.-Envolver correctamente el alimento.

7.- Disponer adecuadamente en envases plásticos y con sus tapas, los líquidos, caldos y zumos, sin llenarlos totalmente ya que tras la congelación aumenta el volumen.

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