Para cocinar el trigo sarraceno podemos hervirlo, lavándolo y tostándolo previamente en una sartén antes de cocerlo en el doble de agua que de grano de trigo.
Sin embargo, si queremos que quede más tierno, debemos añadir media parte más de agua.
Además, si lo hidratamos previamente durante 12 horas al menos, acortaremos su cocción y también lo podremos utilizar triturado para espesar salsas (tiene una gran cantidad de almidón y mucílagos) . Otra opción es también hacer crepes con el resultado, mezclándolo con otros ingredientes si lo deseamos, y tendremos un rico plato para degustar.
