Pues, aunque la gente tenga la certeza de que está comiendo el verdadero wasabi, lo cierto está en que los que se suelen degustar o comprar en formato deshidratado (en polvo) para hidratar con agua y así formar una pasta, suelen ser una mezcla de rábano picante, mostaza y almidones.
El verdadero sabor del wasabi auténtico se acerca incluso a los frutos secos, con un toque sutil y suave, que sube en picante según transcurre el tiempo después de haberlo ingerido. Su producción está muy limitada y son pocos los productores que lo cultivan, con unas condiciones muy especiales de frío y humedad.
Por cierto, cuando comemos sushi, además del “wasabi”, también se suele poner jengibre encurtido, que nos sirve para limpiar la boca antes de cambiar de ingrediente y sabor…
