Se trata de una intolerancia secundaria a otra patología, por lo que se debe averiguar y tratar la causa
Se trata de una intolerancia secundaria a otra patología, por lo que se debe averiguar y tratar la causa.
Es fundamental el tratamiento dietético para una buena evolución y es importante el enfoque personalizado ya que cada persona es un mundo y los grados de intolerancia también.
Se debe tener en cuenta:
- Esta intolerancia suele ir acompañada de intolerancia al sorbitol.
- No tomar alimentos con fructosa y sorbitol en la misma toma.
- Tomar la fructosa acompañada de glucosa puede disminuir la sintomatología.
El objetivo es el de reducir la cantidad de fructosa en la dieta hasta no tener síntomas.
Importante: antes de la retirada total de fructosa, se debe probar con restricción parcial para evitar carencias nutricionales de vitaminas y minerales.
PASOS PARA EL TRATAMIENTO
1. Retirada de fructosa y sorbitol de la dieta mientras haya sintomatología y mantenerse así durante 2-6 semanas.
*Se suelen tolerar pequeñas cantidades, esto es algo a valorar en cada caso.
*Si con la retirada absoluta de la fructosa y sorbitol no mejora la sintomatología, se deberán retirar también los fructanos y polioles.
2. Reintroducir progresivamente los alimentos retirados. Empezar por los de menos contenido en pequeñas cantidades y repartidos en varias tomas. Por ejemplo: ½ mandarina en desayuno, ½ mandarina en merienda.
3. Vigilar las carencias nutricionales si la dieta es muy restrictiva.
La próxima semana continuaremos con los alimentos clasificados en función de su permisividad para el proceso de tratamiento.
Recordaros que, ante una intolerancia, alergia o cualquier problema digestivo, es importante acudir a un profesional cualificado para valorar bien el caso, solicitar las pruebas pertinentes y plantear un tratamiento personalizado. Ante el mismo problema, no tiene por qué funcionar el mismo tratamiento dietético, siempre hay que valorar varios aspectos.
