- No permanezcas en la misma postura durante periodos prolongados.
- Alterna actividades que requieran estar de pie con otras que impliquen estar sentado o en movimiento
- Intercala periodos breves de descanso entre las diferentes actividades.
- Modifica adecuadamente el entorno de trabajo (mobiliario, altura de los objetos, iluminación…), busca la situación más cómoda y segura para la espalda.
- Evita prisas, que llevan mayores riesgos.
- Sentado, apoya completamente los pies en el suelo y mantén las rodillas al nivel de las caderas.
- Sitúa la pantalla del ordenador a unos 45cm. a la altura de los ojos o ligeramente por debajo.
- Al coger peso, agáchate flexionando las rodillas, con la espalda recta y la cabeza levantada, apoyando los dos pies en el suelo, ligeramente separados y lo más cerca posible del peso a cargar.
- Para levantarte de la cama, gira el cuerpo para apoyarte en un costado y después, apoyándote con los brazos, incorpórate de lado hasta sentarte.
- Al levantarte de la silla, apóyate en los reposabrazos.