Conducir un patinete eléctrico no es ninguna broma: cuatro claves para aumentar tu seguridad

Patinete eléctrico en la ciudad de Ourense.
photo_camera Patinete eléctrico en la ciudad de Ourense.
Con el calor de estos días, apetece aún más sacarlo a pasear, al igual que ocurre con las motos. 

Si bien no permite realizar grandes trayectos, el patinete eléctrico es una opción más que válida para recorrer cortas distancias, por ejemplo de casa al trabajo, y que cada vez consigue más adeptos.

Y no es para menos con lo caros que están los combustibles fósiles: ahorras y le ahorras algo de presión ambiental al planeta.

Con el calor de estos días, apetece aún más sacarlo a pasear, al igual que ocurre con las motos. Pero, eso sí, conducir un patinete no es ninguna broma. Para evitar riesgos, proponemos cinco claves rápidas.

1- Corrige tu postura

Mantener una correcta postura es vital para cualquier práctica de nuestra vida (y también para un mejor reposo). Tener esto en cuenta ayuda a reducir el riesgo de accidentes... y de problemas de espalda. Lleva un pie delante del otro y flexiona las rodillas para maniobrar. Se trata de mantener la espalda erguida (no se quiere coger chepa), pero relajada al mismo tiempo, ya que demasiada tensión nos puede provocar lesiones. Debemos movernos con suavidad. Let it flow.

2- Antes de salir, échale un vistazo al parte meteorológico

Las carreteras mojadas son un aspecto a tener muy en cuenta cuando se circula en patinete, ya no solo por lo que te mojes sino porque el riesgo de resbalar es muy alto si el firme se encuentra húmedo. Pero no tienes escusa: con La Región puedes comprobar dándole a un click el tiempo de cada día.

3- Estudia la normativa

Las administraciones no ponen las cosas fáciles, y en cada ciudad las normas pueden variar. Para facilitar las cosas, haz click aquí para chequear las sanciones y su cuantía respectiva para la ciudad de Ourense. 

4- Hay que pasar revisiones

Al igual que un coche, un patinete debe ser revisado de forma periódica. Por ejemplo, cada 4 meses, aunque dependerá de la intensidad del uso. Se recomienda comprobar amortiguaciones, luces, ruedas, frenos... Y, de paso, una obviedad: el conductor y su estado de salud también debe ser revisado de forma regular.

Y, como premio para el lector por haber llegado hasta aquí, un ejemplo de lo que no debe hacerse que fue viral hace unos meses:

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