La profunda crisis económica que atraviesa España afecta de forma directa a las organizaciones no gubernamentales, que han visto muy mermadas las aportaciones públicas, pero algunas están consiguiendo mantener su labor y sus plantillas, en parte gracias a la contribución privada.
Podrían ser el mejor ejemplo de 'cómo hacer más con menos' y aunque algunas de las principales ONG que trabajan en España no han podido evitar reducciones de plantilla y acometer expedientes de regulación de empleo, otras lograron mantener sus proyectos gracias a las aportaciones de voluntarios, logrando que sus acciones tengan el máximo impacto con el mínimo coste.
Algunas optaron por anteponer la asistencia social que prestan al mantenimiento de sus estructuras organizativas y otras reorientaron sus proyectos para atender las crecientes necesidades que están surgiendo en España como consecuencia de la situación económica.
Entre las organizaciones que se han visto obligadas a recortar gastos reduciendo sus plantillas está Intermón-Oxfam, que fue de las primeras en presentar -el pasado mes de marzo- un Expediente de Regulación de Empleo que supuso el despido de casi una quinta parte de sus trabajadores en España.
Otra organización no gubernamental cuya plantilla acusó los recortes es la Cruz Roja, y fuentes de la organización señalaron que algunos proyectos han desaparecido y otros se están atendiendo con menos gente, por lo que la plantilla se vio inevitablemente afectada por la crisis. La misma fuente precisó que los recortes de los últimos años se sitúan en torno al quince y el veinte por ciento.
Algunas optaron por anteponer la asistencia social que prestan al mantenimiento de sus estructuras organizativas y otras reorientaron sus proyectos para atender las crecientes necesidades que están surgiendo en España como consecuencia de la situación económica.
Entre las organizaciones que se han visto obligadas a recortar gastos reduciendo sus plantillas está Intermón-Oxfam, que fue de las primeras en presentar -el pasado mes de marzo- un Expediente de Regulación de Empleo que supuso el despido de casi una quinta parte de sus trabajadores en España.
Otra organización no gubernamental cuya plantilla acusó los recortes es la Cruz Roja, y fuentes de la organización señalaron que algunos proyectos han desaparecido y otros se están atendiendo con menos gente, por lo que la plantilla se vio inevitablemente afectada por la crisis. La misma fuente precisó que los recortes de los últimos años se sitúan en torno al quince y el veinte por ciento.
