El boicot de cientos de 'indignados' al debate de los presupuestos ha obligado hoy a las máximas autoridades políticas de Cataluña a entrar en el Parlament en helicóptero o en furgones blindados para evitar ser agredidas físicamente.
Roger Mateos y Carles EscolàDesde alrededor de las ocho de la mañana, los diputados han empezado a llegar en cuentagotas a pie o en coche al parque de la Ciutadella, donde se ubica el Palau del Parlament.
En general, los más madrugadores han podido entrar sin excesivos problemas, pero los que han ido llegando a partir de las nueve de la mañana se han encontrado ya un ambiente de gran crispación, con los jóvenes 'indignados' cada vez más envalentonados, que han empezado a amenazar físicamente a los parlamentarios que osaban acercarse al acceso al parque por la calle Pujades, esquina Wellington.
Algunos han conseguido penetrar en el parque, con la ayuda de los agentes antidisturbios desplegados, otros han salido corriendo hacia algún lugar seguro, sobre todo las comisarías de los Mossos y de la Guardia Urbana más cercanas o la sede de Unió en la calle Nápoles.
Atrincherados en estos puntos, los diputados han sido trasladados por fases en furgones policiales hasta las puertas del Parlament, al tiempo que llegaban, a partir de las 9.45 horas, helicópteros de los Mossos d'Esquadra y bomberos con otras autoridades.
El primer helicóptero que ha aterrizado en el párking entre el Palau del Parlament y el Zoo de Barcelona transportaba al presidente catalán, Artur Mas, y la presidenta del Parlament, Núria de Gispert.
Otros siete helicópteros han ido aterrizando más tarde, con el grueso de miembros del Govern -Joana Ortega, Andreu Mas-Colell, Boi Ruiz, Josep Maria Pelegrí, Francesc Xavier Mena, Ferran Mascarell, Felip Puig, Pilar Fernández Bozal-, líderes parlamentarios -Joaquim Nadal y Joan Puigcercós- y un diputado: Antoni Fernández Teixidó.
Por un acceso a través del Zoo ha llegado una columna de coches oficiales que han conseguido sortear el cerco de los 'indignados': allí viajaba por ejemplo la popular Alícia Sánchez-Camacho, a la que le da pánico volar y que en el trayecto hasta el Parlament ha podido hablar por teléfono con el presidente del PP, Mariano Rajoy.
Cada uno de los 135 diputados, a medida que iban llegando al Palau del Parlament, iban contando su traumática experiencia, en algunos casos sin esconder su indignación por lo que un cargo del Govern ha bautizado como 'tejerazo con rastas'.
El socialista Joaquim Nadal ha hecho un primer intento de entrar en el recinto del Parlament en su coche oficial, pero ha tenido que desistir cuando algunos de los exaltados se han subido al capó del vehículo; ha tenido que dar marcha atrás y llegar en helicóptero.
El exconseller Ernest Maragall, al intentar entrar por su propio pie al parque de la Ciutadella, se ha visto acorralado por un grupo de jóvenes, que le han empujado, escupido y abroncado, algo parecido a lo que han vivido los socialistas Marina Geli y Esteve Pujol, que han huido a la carrera tras verse rodeados por una multitud.
A la exconsellera Montserrat Tura le han pintado una X con spray en la gabardina mientras, que el ecosocialista Joan Boada ha recibido una ducha de pintura roja.
La diputada de CiU Annabel Marcos ha sido zarandeada y arrojada por los suelos; ya dentro del Parlament ha tenido que ser atendida por los servicios médicos de la cámara por una leve lipotimia.
También con el susto dibujado en el rostro, pálidos por lo que acababan de vivir, el convergente Gerard Figueras y el diputado de Solidaritat Catalana Alfons López Tena han llegado en un furgón de los Mossos d'Esquadra tras haberse visto acorralados en la calle y recibir empujones, golpes, zancadillas y lanzamiento de objetos.
Ambos han salido corriendo hasta refugiarse en un vehículo de la Guardia Urbana, que les ha auxiliado hasta la comisaría de Estación del Norte, desde donde han salido después en un furgón blindado.
Los últimos diputados trasladados en una furgoneta habilitada por los Mossos desde la Estación del Norte han llegado una hora después de que se iniciase el pleno de presupuestos: allí estaban Joan Laporta, Oriol Pujol, Ramon Espadaler, Albert Rivera, Carmen de Rivera, Jordi Cañas, Dolors Batalla, Maria de los Llanos de Luna.
También se ha habilitado un espacio para el diputado discapacitado, en silla de ruedas, el convergente David Bonvehí.
Para evitar a los 'indignados', han realizado una 'extraña visita' al zoológico, en palabras de Laporta, anexo al parque de la Ciutadella en el que se encuentra el Parlament.
Tras ver desde las rejas del furgón blindado a los leones y los monos del zoo, el vehículo ha enfilado hacia la cámara, donde ya hacía una hora que Mas-Colell defendía las cuentas públicas.
En general, los más madrugadores han podido entrar sin excesivos problemas, pero los que han ido llegando a partir de las nueve de la mañana se han encontrado ya un ambiente de gran crispación, con los jóvenes 'indignados' cada vez más envalentonados, que han empezado a amenazar físicamente a los parlamentarios que osaban acercarse al acceso al parque por la calle Pujades, esquina Wellington.
Algunos han conseguido penetrar en el parque, con la ayuda de los agentes antidisturbios desplegados, otros han salido corriendo hacia algún lugar seguro, sobre todo las comisarías de los Mossos y de la Guardia Urbana más cercanas o la sede de Unió en la calle Nápoles.
Atrincherados en estos puntos, los diputados han sido trasladados por fases en furgones policiales hasta las puertas del Parlament, al tiempo que llegaban, a partir de las 9.45 horas, helicópteros de los Mossos d'Esquadra y bomberos con otras autoridades.
El primer helicóptero que ha aterrizado en el párking entre el Palau del Parlament y el Zoo de Barcelona transportaba al presidente catalán, Artur Mas, y la presidenta del Parlament, Núria de Gispert.
Otros siete helicópteros han ido aterrizando más tarde, con el grueso de miembros del Govern -Joana Ortega, Andreu Mas-Colell, Boi Ruiz, Josep Maria Pelegrí, Francesc Xavier Mena, Ferran Mascarell, Felip Puig, Pilar Fernández Bozal-, líderes parlamentarios -Joaquim Nadal y Joan Puigcercós- y un diputado: Antoni Fernández Teixidó.
Por un acceso a través del Zoo ha llegado una columna de coches oficiales que han conseguido sortear el cerco de los 'indignados': allí viajaba por ejemplo la popular Alícia Sánchez-Camacho, a la que le da pánico volar y que en el trayecto hasta el Parlament ha podido hablar por teléfono con el presidente del PP, Mariano Rajoy.
Cada uno de los 135 diputados, a medida que iban llegando al Palau del Parlament, iban contando su traumática experiencia, en algunos casos sin esconder su indignación por lo que un cargo del Govern ha bautizado como 'tejerazo con rastas'.
El socialista Joaquim Nadal ha hecho un primer intento de entrar en el recinto del Parlament en su coche oficial, pero ha tenido que desistir cuando algunos de los exaltados se han subido al capó del vehículo; ha tenido que dar marcha atrás y llegar en helicóptero.
El exconseller Ernest Maragall, al intentar entrar por su propio pie al parque de la Ciutadella, se ha visto acorralado por un grupo de jóvenes, que le han empujado, escupido y abroncado, algo parecido a lo que han vivido los socialistas Marina Geli y Esteve Pujol, que han huido a la carrera tras verse rodeados por una multitud.
A la exconsellera Montserrat Tura le han pintado una X con spray en la gabardina mientras, que el ecosocialista Joan Boada ha recibido una ducha de pintura roja.
La diputada de CiU Annabel Marcos ha sido zarandeada y arrojada por los suelos; ya dentro del Parlament ha tenido que ser atendida por los servicios médicos de la cámara por una leve lipotimia.
También con el susto dibujado en el rostro, pálidos por lo que acababan de vivir, el convergente Gerard Figueras y el diputado de Solidaritat Catalana Alfons López Tena han llegado en un furgón de los Mossos d'Esquadra tras haberse visto acorralados en la calle y recibir empujones, golpes, zancadillas y lanzamiento de objetos.
Ambos han salido corriendo hasta refugiarse en un vehículo de la Guardia Urbana, que les ha auxiliado hasta la comisaría de Estación del Norte, desde donde han salido después en un furgón blindado.
Los últimos diputados trasladados en una furgoneta habilitada por los Mossos desde la Estación del Norte han llegado una hora después de que se iniciase el pleno de presupuestos: allí estaban Joan Laporta, Oriol Pujol, Ramon Espadaler, Albert Rivera, Carmen de Rivera, Jordi Cañas, Dolors Batalla, Maria de los Llanos de Luna.
También se ha habilitado un espacio para el diputado discapacitado, en silla de ruedas, el convergente David Bonvehí.
Para evitar a los 'indignados', han realizado una 'extraña visita' al zoológico, en palabras de Laporta, anexo al parque de la Ciutadella en el que se encuentra el Parlament.
Tras ver desde las rejas del furgón blindado a los leones y los monos del zoo, el vehículo ha enfilado hacia la cámara, donde ya hacía una hora que Mas-Colell defendía las cuentas públicas.
