La Junta de Castilla y León confirmó ayer la muerte de seis ciervos durante la última semana en varias localidades leonesas de la zona de La Cabrera y limítrofes con la provincia de Zamora, donde el Gobierno regional constató la existencia de 79 cérvidos fallecidos en los últimos trece días.
En La Cabrera fue hallada en la localidad de Pozos una hembra sin causa aparente de muerte, ni lesiones, y en la localidad de Corporales aparecieron dos hembras. La última semana se produjeron varios casos de mortalidad de ciervos en diferentes localidades leonesas limítrofes con Zamora, lugar donde con anterioridad se habían detectado más casos, comenzando por de la Reserva Regional de Caza de la Sierra de la Culebra y la comarca de La Carballeda.
A través de la información facilitada por los guardas privados de los cotos de la localidad de Morla, se da por hecho la muerte de otra hembra la semana pasada; del mismo modo, en la localidad de Nogarejas también murieron dos hembras, todas ellas sin causa aparente. En los últimos días no vieron más. Ante esta situación se dieron instrucciones a los agentes medioambientales de la comarca y zonas próximas de extremar la vigilancia y de detectar ejemplares muertos o enfermos de dicha especie o de otras.
Asimismo, por parte de los veterinarios de la Consejería de Agricultura y Ganadería practicaron necropsias y tomado muestras, las cuales ya se remitieron al Laboratorio Regional de Sanidad Animal de León y en el laboratorio español de referencia de sanidad animal de Algete. Todavía se desconoce la causa de la enfermedad, pero de los resultados de las pruebas realizadas a las muestras remitidas en dichos laboratorios pueden descartar tanto la lengua azul como la enfermedad hemorrágica del ciervo. Esta enfermedad no está afectando a ninguna otra especie silvestre ni doméstica, por lo que no se espera que la ganadería pueda resultar afectada. El Servicio de Medio Ambiente de León lleva a cabo un protocolo de actuación.
A través de la información facilitada por los guardas privados de los cotos de la localidad de Morla, se da por hecho la muerte de otra hembra la semana pasada; del mismo modo, en la localidad de Nogarejas también murieron dos hembras, todas ellas sin causa aparente. En los últimos días no vieron más. Ante esta situación se dieron instrucciones a los agentes medioambientales de la comarca y zonas próximas de extremar la vigilancia y de detectar ejemplares muertos o enfermos de dicha especie o de otras.
Asimismo, por parte de los veterinarios de la Consejería de Agricultura y Ganadería practicaron necropsias y tomado muestras, las cuales ya se remitieron al Laboratorio Regional de Sanidad Animal de León y en el laboratorio español de referencia de sanidad animal de Algete. Todavía se desconoce la causa de la enfermedad, pero de los resultados de las pruebas realizadas a las muestras remitidas en dichos laboratorios pueden descartar tanto la lengua azul como la enfermedad hemorrágica del ciervo. Esta enfermedad no está afectando a ninguna otra especie silvestre ni doméstica, por lo que no se espera que la ganadería pueda resultar afectada. El Servicio de Medio Ambiente de León lleva a cabo un protocolo de actuación.
