El Instituto Nacional de Rescate Marino (NSRI) de Sudáfrica urgió a los numerosos voluntarios que acudieron a intentar rescatar a las decenas de ballenas varadas en una playa meridional del país y que tuvieron que ser sacrificadas a que busquen ayuda psicológica para sobrellevar el trauma, informaron medios locales.
'Sabemos que la situación era muy triste y por eso pedimos a la gente a que busque el apoyo de profesionales que les puedan ayudar a sobrellevar la terrible experiencia', declaró hoy a la emisora local 702 el portavoz del NSRI, Craig Lambinon, quien también quiso dar las gracias por la 'abrumadora contribución' de los ciudadanos de la zona.
Científicos marinos tuvieron ayer que sacrificar de un disparo en la cabeza a 44 de las 55 ballenas piloto varadas en la playa de Kommetjie, cerca de Ciudad del Cabo, en el extremo sur de Sudáfrica, después de que funcionarios y cientos de voluntarios intentaran durante todo el día devolver al mar al grupo de ballenas piloto.
'Lo hemos hecho todo (para intentar devolverlas al mar), pero dan la vuelta y regresan sobre la arena de la playa', señaló Wally Peterson, director de proyectos del grupo Conciencia Medioambiental de Kommetjie.
Las 55 ballenas piloto, de unos tres metros de longitud, empezaron a llegar a la arena de la amplia playa de Kommetjie a las 7.30 de la mañana (05.30 GMT) de ayer, explicó Rice, quien señaló que, probablemente, vararon por 'un error de navegación'.
El NSRI, que ya ha retirado de la playa los cadáveres de las 44 ballenas sacrificadas, dijeron estar abrumados por la respuesta de los habitantes de Ciudad del Cabo. 'En ninguno de los eventos que hemos organizado anteriormente hemos visto una respuesta tan multitudinaria como la de ayer', afirmó
El pasado mes de enero, 53 ballenas esperma murieron sofocadas tras quedar varadas en la isla de Tasmania, al sur de Oceanía, donde se producen frecuentemente estos sucesos que todavía no han podido ser explicados científicamente.
En noviembre de 2008 también perecieron unas 150 ballenas piloto de aleta larga perecieron asfixiadas en la zona, y otros 65 cetáceos de la misma especie quedaron varados en otra playa del sur de Australia y sólo once lograron volver mar adentro ayudados por las autoridades, ecologistas y voluntarios.
Científicos marinos tuvieron ayer que sacrificar de un disparo en la cabeza a 44 de las 55 ballenas piloto varadas en la playa de Kommetjie, cerca de Ciudad del Cabo, en el extremo sur de Sudáfrica, después de que funcionarios y cientos de voluntarios intentaran durante todo el día devolver al mar al grupo de ballenas piloto.
'Lo hemos hecho todo (para intentar devolverlas al mar), pero dan la vuelta y regresan sobre la arena de la playa', señaló Wally Peterson, director de proyectos del grupo Conciencia Medioambiental de Kommetjie.
Las 55 ballenas piloto, de unos tres metros de longitud, empezaron a llegar a la arena de la amplia playa de Kommetjie a las 7.30 de la mañana (05.30 GMT) de ayer, explicó Rice, quien señaló que, probablemente, vararon por 'un error de navegación'.
El NSRI, que ya ha retirado de la playa los cadáveres de las 44 ballenas sacrificadas, dijeron estar abrumados por la respuesta de los habitantes de Ciudad del Cabo. 'En ninguno de los eventos que hemos organizado anteriormente hemos visto una respuesta tan multitudinaria como la de ayer', afirmó
El pasado mes de enero, 53 ballenas esperma murieron sofocadas tras quedar varadas en la isla de Tasmania, al sur de Oceanía, donde se producen frecuentemente estos sucesos que todavía no han podido ser explicados científicamente.
En noviembre de 2008 también perecieron unas 150 ballenas piloto de aleta larga perecieron asfixiadas en la zona, y otros 65 cetáceos de la misma especie quedaron varados en otra playa del sur de Australia y sólo once lograron volver mar adentro ayudados por las autoridades, ecologistas y voluntarios.
