El Ayuntamiento pacta con los inmigrantes zonas destinadas al comercio irregular. La medida, inédita en Cataluña, aspira a pacificar la convivencia

Vendrell y Calafell regularizan la venta ambulante de los 'manteros'

La plaza de la Lluna, donde los manteros venden su mercancía
Los consistorios tarraconenses de El Vendrell y Calafell han sido los primeros de Cataluña en pactar con los 'manteros' para desplazar la venta ambulante ilegal del centro de las localidades, mientras otras poblaciones de la costa siguen persiguiendo el 'top manta'.
Aunque en ambas poblaciones la ordenanza municipal de convivencia no permite la venta ambulante, estas dos localidades han tomado esa decisión tras probar otras posibles soluciones como la represión policial de un fenómeno que aumenta en verano y que, con la crisis, había incrementado su presencia en las calles.

Esta postura no es unitaria en la zona y otras localidades costeras, como Salou y Cambrils, continúan con su política de tolerancia cero hacia los vendedores del 'top manta', con sanciones incluso para aquellos que adquieran sus productos.

Y eso que el pasado 23 de marzo representantes de los Mossos d'Esquadra y de las policías locales de Tarragona, Salou, Vila-seca, Torredembarra, El Vendrell, Cunit, Calafell, Roda de Barà, Altafulla y L'Hospitalet de l'Infant se reunieron para fijar un plan de actuación contra el 'top manta' en la costa tarraconense en tres ámbitos: institucional, policial y judicial.

Con este ejemplo como espejo, el ayuntamiento de Calafell ha sido el siguiente en mover ficha, y por ello ha autorizado un tramo del Paseo Marítimo de Segur de Calafell para que se instalen, gratuitamente, los 'manteros', que a cambio no pueden colocar su mercancía en la zona más comercial de esa misma vía.

El alcalde, Jordi Sánchez (PSC), admite que 'hemos llegado a un acuerdo con este colectivo' y, si se instalan en la zona pactada, junto a la plaza del Mil·lenari, no serán perseguidos por la Policía Local, aunque los comerciantes, los mismos que colgaron pancartas con el lema 'Calafell, capital de la venta ilegal', no están del todo satisfechos con la medida.

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