El Palacio del Elíseo entró hoy en el punto de mira de los medios galos después de que se revelara que se habían llevado a cabo supuestas descargas ilegales en Internet desde una dirección procedente de la sede de la presidencia francesa.
El primero en hacer saltar la alarma fue el blog 'Nikopik', en el que uno de sus lectores habituales, estudiante de informática, se sirvió de webs de espionaje de descargas para descubrir que desde direcciones IP atribuidas al Elíseo se bajaron algunos estrenos de Hollywood y, entre otros, los mejores éxitos de los Beach Boys.
'Lo que puede parecer complicado para el común de los mortales', recogió posteriormente 'Le Monde' sobre dicha investigación, 'es de una simplicidad de niños' para los expertos en la materia debido a la tecnología disponible para tal tipo de hallazgos.
El asunto, según el rotativo, puede resultar divertido por su flagrante contradicción con las directivas del presidente Nicolas Sarkozy y del organismo creado en Francia para vigilar y sancionar las descargas ilegales, Hadopi, pero según los expertos es 'poco probable'.
Los especialistas contactados por el vespertino, como 'Numerama', aseguran que aunque 'ese descubrimiento es perturbador, la página (que permite ver que una dirección IP se ha descargado algo) no demuestra nada'.
Desde una de esas páginas se asegura además en la edición digital de 'Le Nouvel Observateur' que probablemente se trate de alguien que desde su ordenador personal ha utilizado la IP del Palacio para bajarse archivos sin pagar.
La presidencia gala, poco proclive a comentar las noticias aparecidas en la prensa, se ha prestado en esta ocasión a hacerlo y ha negado en 'Le Parisien' la veracidad de tales acusaciones.
'Después de haberlo verificado, no ha habido descargas ilegales desde la red de la presidencia en los últimos meses', aseguró hoy a ese periódico, no sin precisar que se está llevando a cabo un análisis complementario sobre 'el periodo anterior'.
Hadopi indicó a finales de septiembre que en sus 18 meses de existencia ha detectado 22 millones de infracciones que van a quedarse en apenas 'una veintena' de procedimientos judiciales.
El procedimiento habitual, según recordó su presidenta, Marie Françoise Marais, prevé tres avisos por correo electrónico para los infractores, y en el último la precisión de que el caso se denunciará ante la Fiscalía.
