El abandono del rural está causando serios problemas a los pocos habitantes que pueblan el rural de O Barco de Valdeorras. En los últimos días, los trabajadores de la brigada de obras del Concello se dedicaron a reparar averías en los colectores de aguas residuales de dos aldeas: Santigoso y Alixo.
"El problema es que los colectores fueron construidos hace 80 años", explicó el concejal de Obras e Parques Infantís, Miguel Neira Ojea. Añadió que las tuberías acaban obstruídas por la tierra y con roturas provocadas por las raíces de la vegetación.
En estos momentos, los trabajos de este equipo se centran en la renovación de aproximadamente 80 metros del colector que transporta las aguas residuales de una zona de Alixo. Las filtraciones procedentes de esta conducción acaban en las huertas que fueron trabajadas en esta parte del pueblo.
Las obras anteriores comenzaron nada más finalizar las que, durante varias semanas, permitieron sustituir un tramo de 280 metros de colector en la parte alta del núcleo de Santigoso. También aquí, los vertidos acababan en las huertas y castaños.
El daño ocasionado por las aguas sucias que van a parar a las zonas de huertas sería incluso mayor de no ser por el propio abandono del rural. La práctica totalidad de las fincas llevan abandonadas muchos años y están cubiertas por las silvas, las xestas y los chopos, según Miguel Neira.
Una vez finalice la obra de Alixo, la brigada de obras limpiará las cunetas de los viales municipales.
