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El Concello de O Barco apoya un film sobre los ‘fuxidos’ de Casaio

De izquierda a derecha, Miguel Riaño, Eladio Santos y el alcalde de O Barco, Alfredo García.
photo_camera De izquierda a derecha, Miguel Riaño, Eladio Santos y el alcalde de O Barco, Alfredo García.
El Concello aportará 3.000 euros para una película que retratará la guerrilla en la comarca

"Ciudad de la Selva”, una película documental que contará la historia de los “fuxidos” antifranquistas que habitaron y batallaron en el monte valdeorrés, recibirá el apoyo del Concello de O Barco. Así lo confirmaba ayer el concelleiro de Promoción Económica, Turismo, Comercio y Consumo, Eladio Santos, junto al director del largometraje, Miguel Riaño.

El edil de Turismo afirmó que “Ciudad de la Selva” trata “feitos que afectan á nosa historia”. “Se hai un proxecto cultural que está buscando información sobre iso e que nos está ensinando parte do noso pasado, pensamos que o Concello do Barco ten que estar aí”, añadió. El Concello pondrá 3.000 de los 100.000 euros que, de momento, presupuesta la productora. La cooperación se extenderá también al estreno de la película, que se celebrará en la villa barquense en 2022.

Miguel Riaño explicaba que el film tendrá un cariz puramente documental, incluyendo entrevistas, pero que se combinará con una parte de recreaciones por animación. “Imos recrear situacións para que o público poida poñerse nese lugar”, afirmó. Sobre las conversaciones que sostuvieron con gente de la zona, comentó que “aínda existe un medo bastante importante” a hablar del tema.

Valdeorras fue una de las últimas zonas donde se le plantó frente al franquismo desde el monte. Los montes de Casaio acogieron a un buen número de guerrilleros -Riaño los cifra en alrededor de 200- que vivían en la “Ciudad de la Selva”, nombre con el que los propios combatientes bautizaron su base de operaciones.

Según Riaño, “a magnitude e as redes que tiña a guerrilla facían esta historia moi interesante de tratar”. Llevan rodando en las alturas de Carballeda desde hace dos años, una tarea dificultosa debido a las condiciones climáticas de la montaña valdeorresa, especialmente en invierno.

El proyecto es paralelo al trabajo arqueológico del Sputnik Labrego. Riaño también advirtió de la “responsabilidade de representar algo historiográfico”, que implica “non idealizar o sucedido”.

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