El Juzgado Penal 2 de Ourense impuso una condena de dos años de cárcel a Miguel Ángel F.G. por abusos sexuales en una sentencia conformada previamente entre la defensa y la fiscalía.
El inculpado, de 36 años, trabajaba en su propia clínica de fisioterapia en A Rúa y trató a una mujer por molestias cervicales a raíz de un accidente de circulación. Los hechos por los que fue condenado sucedieron el 3 de diciembre de 2019, sobre las doce del mediodía, en una de las sesiones. Aprovechó que la mujer estaba tumbada con un pantalón elástico e introdujo la mano por el interior de la ropa y empezó a tocarle los genitales al tiempo que preguntaba si le gustaba o si tenía molestias en la zona. El propósito no era otro, según la fiscalía, que “satisfacer sus más bajos y denostados instintos sexuales”. Paró cuando la clienta le dijo que no siguiera.
El acusado pidió perdón a la víctima y renunció en la vía penal a la indemnización porque llegó a un acuerdo extraprocesal con él.
En la sentencia de dos años de cárcel, que queda en suspenso siempre que no delinca de nuevo en ese tiempo, se aplicó la agravante de abuso de confianza y la atenuante de reparación del daño (indemnización).
