El proyecto del parque eólico en A Rúa consta de tres aerogeneradores y está localizado próximo a la ZEC Ancares-Courel
El parque eólico Xeada, que promueve Neiva Directorship S. L. en los municipios de A Rúa, Vilamartín de Valdeorras y Quiroga (Lugo), afronta un nuevo trámite, tras la publicación del impacto ambiental en el Diario Oficial de Galicia. Además, aparecen los de A Cañiza y Covelo (Pontevedra), de Alto de Montouto S. L. y A Estrada, Cerdedo-Cotobade y Campo Lameiro (Pontevedra), que promueve Naturgy Renovables S. L. U. La Xunta considera las tres iniciativas “ambientalmente viables”.
Cada uno de los proyectos es “ambientalmente viable, siempre que se cumpla, además de lo recogido en el estudio de impacto ambiental y la restante documentación evaluada, lo condicionado que figura” en el documento, según dice cada declaración de impacto ambiental. En todo caso, si hay contradicciones, “prevalecerá lo dispuesto” en las declaraciones de impacto ambiental. Por otra parte, si surge “cualquier tipo de impacto no considerado hasta el momento”, la Xunta podrá dictar “los condicionados adicionales que resulten oportunos”.
El proyecto del parque eólico Xeada contempla tres aerogeneradores y la infraestructura que lleva asociada, como las pistas de acceso y servicio, las plaformas de montaje, un centro seccionador y de control, así como una torre meteorológica. Con una potencia total instalada de 19,8 MW y una altura de 135 metros, su presupuesto supera los 27,5 millones de euros. La evacuación de la energía generada en el parque será realizada mediante una línea de 30 kv hasta la subestación de Neboada, siendo el plazo de ejecución 12 meses.
Según el expediente de declaración de impacto ambiental, la zona para la que fue proyectado Xeada está localizada entre las riberas del Miño y el Sil, denominada comarca paisajística Terra de Valdeorras y dentro del ámbito visual pueden encontrarse Lugares de Especial Interés Paisajístico, Áreas de Interés Paisajístico e Itinerarios-Senderos-Caminos de interés. Aunque no afecta directamente a la red Galega de Espazos Protexidos, su proximidad a la ZEC Ancares-Courel “impón a necesidade de ter en conta as posibles afeccións”. Ya en cuanto al patrimonio cultural a proteger, fueron localizadas mámoas, medorras, molinos, iglesias y casas.
