En abril de 2006, cuando Emilio Pérez Touriño presidía la Xunta, aprobó la declaración de bien de interés cultural para el santuario de As Ermidas (O Bolo). El decreto 75/2006 debería ir acompañado de la redacción de un plan director para restaurar y buscar los posibles usos del templo. Sin embargo, pasaron siete años y el citado estudio aún no es una realidad.
El conselleiro de Cultura, Educación e Ordenación Universitaria, Xesús Vázquez Abad, anunció ayer que este departamento destinará 50.000 euros para su redacción. En su visita, estuvo acompañado por el alcalde, Manuel Corzo; el director xeral de Patrimonio Cultural, José Manuel Rey Pichel, y la jefa territorial de la Consellería en la provincia, Mercedes Gallego.
En la actualidad, la Consellería trabaja en la licitación de la redacción del plan director , que prevé que estará finalizado seis meses después de su contratación. El trabajo incluirá las características del bien histórico y sus deficiencias constructivas y funcionales, así como las condiciones de mantenimiento, según dijo la Consellería. Finalmente, el plan director analizará sus posibles usos, buscando compatibilizar sus valores culturales y religiosos para ser un referente social y económico.
El santuario tiene sus orígenes en una iglesia construida en 1624. En 2010, las grietas aparecidas en sus muros llevaron a intervenir a la Fundación Nuestra Señorasde As Ermidas, cuyo vicepresidente, Luis Maroto, se veía obligado a gestionar la eliminación de las aguas subterráneas y la instalación de canalones con las ayudas de la dirección xeral de Patrimonio Cultural y de la Diputación.
En la actualidad, la Consellería trabaja en la licitación de la redacción del plan director , que prevé que estará finalizado seis meses después de su contratación. El trabajo incluirá las características del bien histórico y sus deficiencias constructivas y funcionales, así como las condiciones de mantenimiento, según dijo la Consellería. Finalmente, el plan director analizará sus posibles usos, buscando compatibilizar sus valores culturales y religiosos para ser un referente social y económico.
El santuario tiene sus orígenes en una iglesia construida en 1624. En 2010, las grietas aparecidas en sus muros llevaron a intervenir a la Fundación Nuestra Señorasde As Ermidas, cuyo vicepresidente, Luis Maroto, se veía obligado a gestionar la eliminación de las aguas subterráneas y la instalación de canalones con las ayudas de la dirección xeral de Patrimonio Cultural y de la Diputación.