Los vecinos de Outardepregos (O Bolo) urgen resolver el estrecho acceso al pueblo desde la carretera OU-533. Aceptan la rotonda que plantea Política Territorial, pero su pedáneo, Vicente Sabín, se queja de que lleva demasiado retraso.
El pueblo de Outardepregos (O Bolo) está ubicado a un lado de la carretera OU-533, que comunica los pueblos de A Rúa y Viana. Los vecinos de este núcleo de 58 habitantes llevan unos cinco años reclamando la mejora del acceso desde la citada vía . Así lo asegura su pedáneo, Vicente Sabín, quien muestra su malestar ante la falta de respuesta de la Consellería de Política Territorial, Obras Públicas e Transportes.
A saída á estrada ten pouca visibilidade. Se entras lanzado, te vas contra o poste de teléfonos e xa ten habido accidentes, explicó el alcalde pedáneo. Ante el peligro que entraña este cruce, los vecinos se pusieron manos a la obra y colocaron las tuberías que permitirán ensanchar la calle. Sin embargo, Política Territorial paralizó los trabajos, al asegurar que esta obra entra dentro de sus competencias. Non nos deixan facer a obra, comentó Vicente Sabín.
Es más, los técnicos anunciaron la redacción de un proyecto para construir una rotonda, propuesta que los vecinos estiman muy positiva. Pero el compromiso fue adquirido hace unos 10 meses, según el alcalde pedáneo, y desde entonces los vecinos no volvieron a saber nada de la Consellería. Desde el Concello de O Bolo, que dirige el popular Manuel Corzo, se insistió ante la Delegación de Política Territorial en que hay que darle una solución al problema.
Pero todas las gestiones realizadas por el equipo de gobierno siguen sin respuesta.
Total ausencia de señalización vertical
Al escaso ancho del acceso a Outardepregos hay que añadir su deficiente señalización, muy difícil de ver para quienes no residen en el pueblo. O cruce está sin senalizar, se quejó Vicente Sabín, mostrando la total ausencia de señales verticales. Aprovecha la ocasión para quejarse del mal estado en que se encuentran los otros accesos al núcleo, principalmente la estrecha pista que discurre paralela a la OU-533.
Tódolos accesos son de Política Territorial, explica el representante vecinal. Resalta el mal estado en que se encuentra el firme del vial, con numerosos baches, y afirma que los vecinos los arreglarían si la Consellería se lo permite. Ante esta situación, el pedáneo critica la escasa implicación de este departamento en la localidad bolesa.
A saída á estrada ten pouca visibilidade. Se entras lanzado, te vas contra o poste de teléfonos e xa ten habido accidentes, explicó el alcalde pedáneo. Ante el peligro que entraña este cruce, los vecinos se pusieron manos a la obra y colocaron las tuberías que permitirán ensanchar la calle. Sin embargo, Política Territorial paralizó los trabajos, al asegurar que esta obra entra dentro de sus competencias. Non nos deixan facer a obra, comentó Vicente Sabín.
Es más, los técnicos anunciaron la redacción de un proyecto para construir una rotonda, propuesta que los vecinos estiman muy positiva. Pero el compromiso fue adquirido hace unos 10 meses, según el alcalde pedáneo, y desde entonces los vecinos no volvieron a saber nada de la Consellería. Desde el Concello de O Bolo, que dirige el popular Manuel Corzo, se insistió ante la Delegación de Política Territorial en que hay que darle una solución al problema.
Pero todas las gestiones realizadas por el equipo de gobierno siguen sin respuesta.
Total ausencia de señalización vertical
Al escaso ancho del acceso a Outardepregos hay que añadir su deficiente señalización, muy difícil de ver para quienes no residen en el pueblo. O cruce está sin senalizar, se quejó Vicente Sabín, mostrando la total ausencia de señales verticales. Aprovecha la ocasión para quejarse del mal estado en que se encuentran los otros accesos al núcleo, principalmente la estrecha pista que discurre paralela a la OU-533.
Tódolos accesos son de Política Territorial, explica el representante vecinal. Resalta el mal estado en que se encuentra el firme del vial, con numerosos baches, y afirma que los vecinos los arreglarían si la Consellería se lo permite. Ante esta situación, el pedáneo critica la escasa implicación de este departamento en la localidad bolesa.
