“Lo hacían antes, pero desde hace un tiempo se ha incrementado, los coches circulan a una velocidad muy peligrosa”. Así lo afirmó una vecina de Portela, en Vilamartín de Valdeorras, quienes expresaron el sentir general del pueblo y “el miedo de que en algún momento vaya a haber un accidente, porque hay niños y gente mayor; si alguno sale a la carretera, es imposible frenar a tiempo”.
Desde hace tiempo, y más notablemente desde que el Concello la asfaltó, los vehículos que circulan por la arteria que cruza la localidad, lo hacen a velocidades muy superiores a los 30 kilómetros por hora establecidos como máximo. Sobre ello habló otra vecina, cuya vivienda está pegada a la carretera. “Los escucho pasar de noche y de día; de noche, pues no pasa gente, pero hace unos días, fue a las 13,00 horas, escuché a un coche venir rápido, salí de mi cocina y bajé a la acera, unos 50 metros, ya no me dio tiempo a verlo de lo rápido que pasó, ¡ni sé de qué color era!”, explicó.
Además de vehículos de cuatro ruedas, los vecinos han observado que incluso los ciclistas alcanzan grandes velocidades a su paso por el pueblo. “Quizás se pueda ir un poco por encima de la velocidad máxima, pero no a más de noventa como pasan algunos”, explicó esta vecina.
Solución
Los vecinos de A Portela plantearon al Concello colocar badenes, pero no consideró válida la propuesta. “Ese problema témolo en todos os pobos. Non podemos encher de badenes todos os sitios porque é imposible. Puxémolos en Valdegodos e en Vilamartín, e tivemos que sacalos polo ruido que provocaban”, dijo el alcalde, Enrique Álvarez. Confesó no saber cómo atajar un problema que no es más que “de educación e civismo”. Los vecinos insisten en que “algo hay que hacer, para evitar un disgusto”.
