Quiere acabar con los problemas de abastecimiento de Valdegodos y Arcos
Los problemas de abastecimiento de agua que sufren los vecinos de Valdegodos y Arcos, en Vilamartín podrían ser solucionados en un plazo no muy lejano. Para resolverlos, el Concello que dirige Enrique Álvarez Barreiro envió un escrito a la Confederación Hidrográfica do Miño-Sil solicitando permiso para construir una captación en el río Farelos.
La población de las dos localidades lleva semanas utilizando el agua que el Concello bombea de la red de abastecimiento de la capitalidad municipal, situándola al límite de su capacidad y amenazando al suministro de sus viviendas. Si bien las últimas lluvias también permitieron retomar el suministro desde el manantial que venían utilizando habitualmente, el caudal disminuyó considerablemente y obliga a buscar una nueva fuente para llevar agua a las casas.
En un principio, el Concello sopesó la posibilidad de coger el agua desde el Leira, aprovechando la falta de actividad de las canteras de pizarra que se encuentran ubicadas río arriba. Sin embargo, la necesidad de tener que bombear el líquido para hacerlo llegar hasta Valdegodos y Arcos llevó al equipo técnico municipal a cambiar de decisión y plantear la opción de construir una nueva captación en el Farelos.
La alternativa de este río supondrá una mayor inversión, pues el Concello deberá construir 2,8 kilómetros de tubería. Estos trabajos supondrán una inversión valorada en aproximadamente 30.000 euros, una cantidad superior a la del proyecto del río Leira. Eso sí, tiene una importante ventaja: una vez construida, el agua llegará al depósito sin necesidad de bombeo, ahorrando costes de funcionamiento y mantenimiento.
El alcalde socialista vilamartinés, Enrique Álvarez, después de confirmar el envío de la documentación a la Confederación Hidrográfica do Miño-Sil, mostró su confianza en que este organismo responderá favorablemente a su petición. En tanto el permiso no llega, el Concello seguirá abasteciendo a los dos pueblos con la traída de Vilamartín, a pesar de las frecuentes roturas de sus tuberías.
