Carlos Núñez: "Ourense es la energía de Vigo, habría que rendir tributo a esta provincia"

El Claustro Barroco se ha convertido este verano en el epicentro de la actividad cultural en Celanova, con un variado cartel al que esta noche se sumará la celebración de los 25 años del “A Irmandade das Estrelas” de Carlos Núñez. Cuarto año consecutivo en Celanova Ya hemos hecho tradición, es maravilloso. Celanova apostó desde el principio y hoy está a la altura del Palau de la Música de Barcelona o Madrid. Me gusta apodar a Celanova como la Viena de Galicia, porque es un lugar increíble, donde la música suena preciosa y ese claustro tiene mucha magia. ¿Cuál será el repertorio de esta noche? Vamos a tener muchas novedades. Tocaremos temas del último disco, para el que hemos contado con grandes colaboraciones. Una de las que más ilusión me hizo fue con gente muy joven del trap y las músicas urbanas, con quienes grabamos la “Muñeira de Novoneyra”. Un poema que Uxío Novoneyra me dedicó cuando salió “Irmandade” con el difícil encargo de musicalizarlo algún día, y digo difícil porque tiene unas rimas irregulares, pero estos chavales de Vigo, colaboradores de C. Tangana, con su virtuosismo del trap le han dado una vuelta y ha quedado una canción súper moderna, súper innovadora y estoy muy contento. También vamos a seguir estrenado estas melodías celtas de Beethoven que hemos ido grabando y, es el 800 aniversario de Alfonso X El Sabio con sus cantigas medievales, así que le rendiremos también homenaje. ¿Qué siente al darle visibilidad a todo ese patrimonio inmaterial? Me siento parte de una cadena mágica, una cadena que es la tradición y es increíble porque así es Galicia, sabiduría. Esta trasmisión de cosas que llevan miles de años funcionando y ese “modus operandi” que se repite, continuamente renovar y hacer cosas nuevas basadas en la tradición. Lo hizo Alfonso X hace 800 años y después Beethoven y ahora lo hacemos nosotros con los del trap. Vamos a empezar a llamar a nuestra música, música molecular, porque cogemos esas moléculas preexistentes de la tradición y con ello componemos. ¿La misma filosofía que sigue en su último disco? Acabo de hacer 50 años y yo estoy aprendiendo de estos chavales del trap, de su estética, de su visión de la música electrónica, de su sabiduría con las redes… Es un continuo aprendizaje intergeneracional y es uno de los valores más maravillosos que tiene Galicia: la lareira. Todos hemos escuchado las historias de nuestros abuelos en esas “lareiras”. Esto no pasa en otros países y pierden su personalidad. En cambio cualquier vigués sigue manteniendo la finca o la casa familiar en Ourense, por si acaso… Yo siempre digo que, en el fondo, Vigo y Ourense son lo mismo, la misma ciudad. Habría que hacer que en Vigo redescubran Ourense, se debería rendir tributo a esta provincia que es la energía de Vigo. Mirando 25 años atrás, ¿cómo recuerda aquel éxito? Cuando salió “Irmandade”, la música era algo muy importante en las casas. La gente se gastaba el sueldo de un mes en comprar un equipo de música y, entonces, en el momento más álgido de la industria discográfica salió “Irmandade”. Fue disco de platino, una locura. Yo, que soy un gaiteiro, vendí un millón de discos. Hoy estamos en un momento diferente, la música se escucha de manera distinta, los más jóvenes tienen su propio mundo, su “Star system”. Pero, en el fondo, Rosalía y C. Tangana siguen inspirándose de las tradiciones, de lo antiguo, para hacer cosas nuevas.