Baltar celebró un encuentro intergeneracional que incluyó juegos, música y una "macropaella
La lluvia restó brillo, pero no diversión a la "VII Festa Popular" de Baltar que ayer concentró a cerca de 500 personas en el encuentro transfronterizo e intergeneracional celebrado en el área recreativa municipal de O Caneiro.
Un año más, el Concello con la colaboración de la Diputación de Ourense, lideró la organización de una atípica fiesta veraniega donde no faltaron los juegos tradicionales (más de 20), la exaltación de la cultura y el patrimonio natural, el deporte y la música en un ambiente sano y sin alcohol. "Esta es una fiesta sana, en la que se implica el 99% de la juventud de Baltar y donde cada año vienen más vecinos portugueses", resumía el regidor, José Antonio Feijóo, que subrayó el papel que ha jugado el evento en la recuperación de juegos tradicionales "muchos de ellos estaban perdidos y, gracias a la fiesta, ahora se están recuperando en los dos márgenes de la frontera".
El agua representó la cruz de la jornada por partida doble. Los meses de sequía dejaron ayer una imagen que no se recordaba en el municipio "ver el río seco, por lo que algunos de los juegos que teníamos organizados para el río, hubo que cambiarlos", explicó el regidor. Sin embargo, la ansiada lluvia, llegó por la tarde obligando a suspender una de las actividades más esperadas: la exhibición de parapente. "No hubo parapente, pero si una vistosa exhibición de paramotor y una exposición de parapente tradicional", aclaraba Feijóo, que presumió de contar con unas de las localizaciones más importantes del norte de España.
Prueba de alcoholemia
Al caer la tarde, el área recreativa bajó el ritmo para degustar una sabrosa "macropaella", amenizada con la música de la banda de gaitas A Raia de Baltar, el grupo de concertinas Os Lordes de Montealegre, así como la prestigiosa discoteca móvil DMR. Precisamente la música disco fue la que animó la fiesta sin alcohol que, hasta la medianoche, se desarrolló en el área recreativa.
La organización, en su ánimo de fomentar una "fiesta sana", invitó a una consumición sin alcohol cada hora a los jóvenes. "A las doce se realizará voluntariamente una prueba de alcoholemia que, si dan negativo, tendrán como premio una camiseta conmemorativa", apuntó el alcalde, quien destaca que cada año hay menos resultados positivos. "El 95% de los jóvenes que se someten a la prueba, entre 150 y 200, dan negativo", añadió.
