Naturaleza, ocio y aventura se entremezclan en Ribadavia, donde el visitante tendrá la posibilidad de darse un refrescante chapuzón en sus piscinas y playas fluviales de aguas cristalinas y pequeñas cascadas en medio de rocas y peñas. El descanso y la tranquilidad están asegurados, ya que a lo largo y ancho de la villa hay espacios naturales destinados al ocio y entretenimiento.
La villa de Ribadavia no sólo es cultura e historia, ya que es un lugar ideal para evadirse y recrearse en sus hermosos valles, montañas, lagos, áreas recreativas y playas fluviales.
Aquí tendrá la posibilidad de realizar su actividad preferida. Si le gusta el agua, disfrutará del piragüismo, remo y windsurf en el río Avia o en el parque náutico de Castrelo de Miño.
En el área recreativa de A Veronza los visitantes aprovechan las tardes de verano para darse un chapuzón en sus piscinas, situadas muy cerca del núcleo histórico de Ribadavia.
Tienen una amplia zona de aparcamientos y duchas, además hay una magnífica playa fluvial, parque infantil, restaurantes y zona polideportiva con todos los servicios en torno al río Avia.
Otra entorno aconsejable para el descanso es al lado del molino de A Raiña, donde hay una área frecuentada por bañistas que buscan la tranquilidad en las pequeñas pozas.
A tan solo un kilómetro de Ribadavia, en el río Outeiro, están ubicadas las pozas de Francelos, un hermosos lugar natural de aguas cristalinas y pequeñas cascadas.
Los amantes de la aventura podrán adentrarse en sus míticas rutas medievales, como la ruta de la historia del vino y del románico, la escalada en el conjunto megalítico de Pena Corneira, o bien realizar recorridos en catamarán por el río Miño que le sumergirán en un entorno atractivo e idílico. También vale la pena recorrer el cañón del Avia, introducirse por cuevas y pasadizos de origen celta.
Aquí tendrá la posibilidad de realizar su actividad preferida. Si le gusta el agua, disfrutará del piragüismo, remo y windsurf en el río Avia o en el parque náutico de Castrelo de Miño.
En el área recreativa de A Veronza los visitantes aprovechan las tardes de verano para darse un chapuzón en sus piscinas, situadas muy cerca del núcleo histórico de Ribadavia.
Tienen una amplia zona de aparcamientos y duchas, además hay una magnífica playa fluvial, parque infantil, restaurantes y zona polideportiva con todos los servicios en torno al río Avia.
Otra entorno aconsejable para el descanso es al lado del molino de A Raiña, donde hay una área frecuentada por bañistas que buscan la tranquilidad en las pequeñas pozas.
A tan solo un kilómetro de Ribadavia, en el río Outeiro, están ubicadas las pozas de Francelos, un hermosos lugar natural de aguas cristalinas y pequeñas cascadas.
Los amantes de la aventura podrán adentrarse en sus míticas rutas medievales, como la ruta de la historia del vino y del románico, la escalada en el conjunto megalítico de Pena Corneira, o bien realizar recorridos en catamarán por el río Miño que le sumergirán en un entorno atractivo e idílico. También vale la pena recorrer el cañón del Avia, introducirse por cuevas y pasadizos de origen celta.
