Con 32 años de historia con la nueva gerencia pero ubicados en un local con más de un siglo de vida, Bimba se presenta como un “clásico de los Vinos” en el que comer lo mejor de la cocina tradicional gallega. Su oferta incluye menú del día y carta, pero en cualquiera de sus platos reina lo casero.
La estrella es el caldo gallego, tanto entre los ourensanos como, sobre todo, entre los turistas que cada verano visitan la zona. Y son los mediodías el horario fuerte de este restaurante clásico del callejero ourensano, que por las noches se especializa en raciones y tapas, de las que presentan más de 35 variedades. Chipirones, lacón, oreja o un raxo “espectacular” son algunas de estas propuestas.
Entre sus clientes cuentan con habituales de toda la vida y otros que se han ido incorporando a lo largo de los años. Según cuentan desde el establecimiento, los más jóvenes rondan la treintena. Sea cual sea su edad, el objetivo de toda la clientela es el mismo, comer casero y natural.
Y allí están Domi a los fogones y Ramiro para atender a vecinos y visitantes, con un plato de cocina tradicional con el máximo sabor esperando para recibirles. Uno de los históricos de la zona de los Vinos es también un referente de ingredientes de calidad y un servicio que ofrece un ambiente tranquilo y familiar.
