En la sociedad actual ningún trabajo se basa únicamente en el esfuerzo individual, sin ninguna duda podemos afirmar que el éxito viene determinado por la capacidad de trabajar en equipo. A corto y a largo plazo el trabajo conjunto aporta mucho más que el trabajo individual. En este sentido, el éxito del equipo no es resultado ni de la buena suerte ni del trabajo de una sola persona (independientemente de lo buena que sea) sino del esfuerzo de todos. Por ello insistimos en la importancia de establecer el trabajo colaborativo porque la colaboración resulta fundamental en nuestra sociedad globalizada e interconectada. La sociedad actual necesita personas que trabajen en equipo, un equipo compuesto por diferentes perfiles donde todos suman y ninguno resta. Aunque podemos aplicarlo a todos los ámbitos aquí nos vamos a centrar en el educativo, donde se presentan desafíos para crecer como persona y profesionalmente, ya que la educación es la base de todo.
Equipos de trabajo eficaces
Para crear un buen equipo de trabajo debemos tener en cuenta las siguientes indicaciones: el director/a o líder del equipo debe inspirar, motivar y realizar frecuentemente reuniones individuales y grupales, establecer objetivos comunes, definir tareas acordadas previamente, crear una comunicación fluida y eficaz, valorar a todo el equipo, utilizar el “nosotros” y olvidar el “yo”, no favorecer el individualismo y la competitividad, gestionar y resolver los conflictos, fomentar la participación activa de todos y la cohesión del grupo y favorecer la creación de un clima de confianza, respeto y tolerancia ya que los valores que comparten los equipos colaborativos son: comunicación, positividad, confianza y responsabilidad. Y todos los miembros del equipo deben compartir ideas y aportar soluciones, evitar hacer grupos, valorar el trabajo de los demás y reconocer que siempre hay algo nuevo que aprender, trabajar de manera coordinada y contribuir con aportaciones individuales sin diferenciar a los miembros del grupo, promover el respeto y compromiso, mantener siempre la calma y establecer límites, fomentar la empatía y compartir situaciones de convivencia diaria. De este modo, trabajar en equipo facilita enormemente el día a día y mejora tu calidad de vida.
Aprendizaje colaborativo
Centrándonos en el ámbito educativo y teniendo en cuenta que: 1. los principales marcos de competencias para la educación del siglo XXI incluyen la colaboración como una competencia básica, 2. el marco de competencias clave para el aprendizaje permanente de la Unión Europea (2006) incluye la colaboración en la competencia digital y en las competencias sociales y cívicas, y 3. en las habilidades para el aprendizaje y la innovación, encontramos tres competencias: a) creatividad e innovación, b) pensamiento crítico y resolución de problemas y c) comunicación y colaboración, podemos afirmar que los centros con mayor grado de colaboración entre los docentes mejora la atención a la diversidad, obtienen mejores resultados, hay mayor compromiso, mejor comunicación, menos estrés y más satisfacción laboral de los que trabajan juntos por un objetivo común.
Además, los estudiantes se caracterizan por: mayor autonomía, mejor capacidad de expresión oral y escrita, destacado desarrollo de habilidades sociales y emocionales (escucha activa, comunicación efectiva, resolución de conflictos, respeto y empatía). Por lo tanto, el trabajo colaborativo te permite compartir ideas/experiencias y potenciar al máximo la colaboración con otros docentes y expertos educativos de todo el mundo. Las tecnologías de la información y la comunicación facilitan la posibilidad de colaborar a distancia compartir información, realizar actividades en documentos compartidos y participar en foros.
Los centros educativos están experimentando un cambio de metodología donde el conocimiento ya no se trasmite, el conocimiento se construye a través de la acción y se deja atrás la enseñanza tradicional (la clase magistral) y se apuesta por las metodologías activas (Aula invertida, Aprendizaje basado en proyectos, Gamificación, Design thinking, Aprendizaje cooperativo, Aprendizaje basado en problemas, Visual thinking, Juego de rol, Aprendizaje por descubrimiento, Aprendizaje Servicio, Aprendizaje 3.0…) y el aprendizaje basado en competencias. Actualmente, los centros educativos son más abiertos, sociales y dinámicos, reflejo de una sociedad en red que aprovecha la tecnología para la construcción común de recursos y contenidos. En esta línea destacar la fuerte apuesta de la Consellería de Cultura, Educación, Formación Profesional e Universidades de la Xunta de Galicia para dotar a todos los centros educativos con Polos Creativos, un espacio con una amplia variedad de recursos para desarrollar las competencias digitales, fomentar el pensamiento crítico, la resolución de problemas, el trabajo en equipo y la creatividad en un mundo cada vez más digitalizado e interconectado. Este espacio estará dotado con un equipamiento especializado donde se trabajará: inteligencia artificial, procesado audiovisual y artístico, realidad virtual, impresión 3D, electromecánica, robótica…
Por ello, colaborar debe formar parte de la educación, ya que permite formar estudiantes no solo empáticos, cooperantes, críticos y flexibles sino también capaces de colaborar con cualquier persona en un proyecto, más allá de las personas cercanas con las que ya tienen confianza y/o amistad.
Para aplicar el aprendizaje cooperativo el docente que es guía/acompañante en el proceso de enseñanza-aprendizaje, utiliza las metodologías mencionadas anteriormente y 1. organiza a los estudiantes por equipos estableciendo objetivos claros para que se sientan más motivados y comprometidos, 2. promueve la comunicación con confianza y sin miedo, siempre con respeto y mente abierta a las ideas de los demás, 3. fomenta la creatividad y la innovación, 4. potencia el uso de recursos y herramientas digitales y 5. facilita herramientas de autoevaluación (rúbricas).
En resumen, los docentes innovadores colaboran y los estudiantes a través del aprendizaje colaborativo rompen con el individualismo y la competitividad e interiorizan una forma de estudiar, trabajar y aprender que les ayudará en su desarrollo educativo, personal y social y le facilitará su incorporación al mundo laboral.
