El alcalde de Xermade (Lugo), el socialista Roberto García, ha asegurado este lunes que son "pocos" los vecinos, "entre 3 ó 4", los que faltan por ceder terrenos para proceder al arreglo de la carretera que une Momán con As Pontes, la LU-P-2204, que es de titularidad provincial.
El mal estado de esta carretera, estrecha y con baches, llevó este fin de semana al párroco de Momán, Luis Rodríguez Patiño, a oficiar una misa en la zona para reclamar la "intervención divina" para repararla.
Roberto García, que también es diputado provincial, ha recordado que "van hechos cuatro kilómetros y estaban adjudicados por parte de la Diputación otros cuatro". "Falta la cesión (de terrenos) de unos pocos propietarios y por eso no se han empezado los trabajos", ha explicado.
"La intención de la Diputación es hacerlo (el arreglo por el que se comprometieron 500.000 euros), pero como el resto de vecinos hicieron cesión de sus terrenos no se va a expropiar ahora a nadie", ha sostenido.
Por ello, ha emplazado a esos "tres o cuatro" vecinos a que cedan esos fincas, en lo que "sería una franja estrecha por los laterales de la carretera" para ser acondicionada "con aglomerado y pintura", ha abundado.
En cuanto a que se esté presionando a esos vecinos, según denunció el PP de ese Ayuntamiento, el alcalde lo ha rechazado. "No es razonable que un partido ponga zancadillas para una obra de futuro", ha concluido.
Balseiro: "El instrumento de la administración es la expropiación"
Por parte de la Xunta, el delegado en Lugo, José Manuel Balseiro, que no quiso polemizar al "no ser una carretera" que dependa del Gobierno gallego, ha incidido en que son "extrañas" las declaraciones, con respecto a esa cesión de terrenos, que también hacía la portavoz socialista en la Diputación, Pilar García Porto.
Balseiro ha apelado a que "los vecinos pueden ceder o no ceder los terrenos, pero la administración tiene un instrumento para llevar adelante las obras" y ese "instrumento" es la expropiación, ha apuntado el delegado del Gobierno gallego en Lugo.
