Solo el empecinamiento de dos jueces de la Audiencia Nacional, los mismos que han sido recusados para juzgar todos y cada uno de los juicios en los que está inculpado de una u otra forma el PP, se han empeñado en sentar en el banquillo al edil madrileño Guillermo Zapata, y lo han conseguido tras obligar al juez instructor a elevar a la sala el caso de los tuits ofensivos sobre Irene Villa, que había cerrado en dos ocasiones precedentes. Una vez más la fiscalía no acusa, como en el caso Nóos, pero ahora no parece importar y a pesar de que Irene Villa no se siente agraviada y de que los tuits supuestamente ofensivos han sido descontextualizados. Los jueces quieren hacer un ensayo doctrinal sobre la humillación… con dinero de todos.
