De día para señalar en la 'historia urbana, cultural e social de Ourense' calificó ayer el alcalde, Agustín Fernández, la apertura al público de la planta noble del Banco de España, reconvertida ahora en un centro municipal que llevará el nombre del poeta ourensano José Ángel Valente, según hizo oficial ayer -por urgencia- la junta de gobierno.
La decisión traerá polémica, no por Valente, sino por el procedimiento seguido, ya que el PP considera que ese acuerdo ha de ser potestad del pleno mediante un expediente de honores. Con todo, la figura de Valente estuvo presente en el acto institucional, tanto a través de la presencia de familiares del poeta como de la lectura de algunos de sus versos.
Los 600 metros cuadrados de los que dispondrá durante 25 años el Concello en el emblemático edificio abrieron sus puertas con una exposición de arte contemporáneo de la colección de Gas Natural Fenosa -'Identidade e Ausencia'-, que recorre en 23 piezas la representación de la figura humana a lo largo de los últimos 20 años. Los primeros espectadores de la muestra, que estará en el centro hasta octubre, fueron los numerosos representantes políticos y de entidades sociales, culturales y económicas que acudieron a un acto inaugural sin placa conmemorativa ni otros alardes. Los 10 concejales del gobierno socialista -faltaba Alfonso Vilachá- estuvieron acompañados de, entre otros, el presidente de la Diputación, Manuel Baltar; el subdelegado del Gobierno, Roberto Castro; y varios ediles del PP. Ningún concejal del BNG acudió al acto al que, sin embargo, asistieron exediles de la formación -que cogobernaron la ciudad-, como el exteniente de alcalde, Alexandre Sánchez Vidal, o Ana Garza.
Tanto el alcalde como la concejala de Cultura, Ana Garrido, destacaron en sus intervenciones las 'longas' negociaciones con Segipsa, entidad estatal propietaria del edificio, para lograr que el Concello dispusiese de este espacio, cuyo comienzo situaron ambos en 2007 cuando el exalcalde, Francisco Rodríguez -'o noso querido alcalde', dijo Garrido- aún era candidato a la Alcaldía. La implicación de unos y otros es la 'historia dun éxito colectivo', señaló Agustín Fernández.
ACUERDO
El regidor defendió el acuerdo alcanzado con Segipsa, por el que la sociedad estatal cede al Concello el uso de este espacio durante 25 años a cambio del pago de un canon anual proporcional a la reforma de esta planta (unos 40.000 euros al año). Según señaló, el acuerdo tuvo en cuenta 'a reivindicación da recuperación do Banco de España, tan sentida na cidade; facelo compatible cunhas instalacións modernas para o Catastro e protexer o edificio histórico cunha rehabilitación de calidade'. Así, las plantas superiores del edificio, a las que se accede por una entrada lateral desde la calle Concordia, están ocupadas por el Catastro; mientras que al centro cultural de uso municipal se accede desde el Paseo.
Los 600 metros cuadrados de los que dispondrá durante 25 años el Concello en el emblemático edificio abrieron sus puertas con una exposición de arte contemporáneo de la colección de Gas Natural Fenosa -'Identidade e Ausencia'-, que recorre en 23 piezas la representación de la figura humana a lo largo de los últimos 20 años. Los primeros espectadores de la muestra, que estará en el centro hasta octubre, fueron los numerosos representantes políticos y de entidades sociales, culturales y económicas que acudieron a un acto inaugural sin placa conmemorativa ni otros alardes. Los 10 concejales del gobierno socialista -faltaba Alfonso Vilachá- estuvieron acompañados de, entre otros, el presidente de la Diputación, Manuel Baltar; el subdelegado del Gobierno, Roberto Castro; y varios ediles del PP. Ningún concejal del BNG acudió al acto al que, sin embargo, asistieron exediles de la formación -que cogobernaron la ciudad-, como el exteniente de alcalde, Alexandre Sánchez Vidal, o Ana Garza.
Tanto el alcalde como la concejala de Cultura, Ana Garrido, destacaron en sus intervenciones las 'longas' negociaciones con Segipsa, entidad estatal propietaria del edificio, para lograr que el Concello dispusiese de este espacio, cuyo comienzo situaron ambos en 2007 cuando el exalcalde, Francisco Rodríguez -'o noso querido alcalde', dijo Garrido- aún era candidato a la Alcaldía. La implicación de unos y otros es la 'historia dun éxito colectivo', señaló Agustín Fernández.
ACUERDO
El regidor defendió el acuerdo alcanzado con Segipsa, por el que la sociedad estatal cede al Concello el uso de este espacio durante 25 años a cambio del pago de un canon anual proporcional a la reforma de esta planta (unos 40.000 euros al año). Según señaló, el acuerdo tuvo en cuenta 'a reivindicación da recuperación do Banco de España, tan sentida na cidade; facelo compatible cunhas instalacións modernas para o Catastro e protexer o edificio histórico cunha rehabilitación de calidade'. Así, las plantas superiores del edificio, a las que se accede por una entrada lateral desde la calle Concordia, están ocupadas por el Catastro; mientras que al centro cultural de uso municipal se accede desde el Paseo.
