Las precipitaciones intensas de la mañana obligaron a cerrar al tráfico la intersección del Puente Nuevo y Alfredo Brañas, en la ciudad

La primera lluvia del otoño frenó la vendimia y complicó el tráfico

Sumidero tragando agua en As Burgas. (Foto: JAINER BARROS)
El primer día de fuertes lluvias causó numerosas incidencias en la provincia e influyó de forma notable en las tareas de vendimia, que estaba previsto que se iniciaran ayer en la comarca de Valdeorras. Los socios de la bodega cooperativa Jesús Nazareno de O Barco acudieron a cuentagotas al recinto, algunos con la fruta recogida durante la tarde del jueves.
A última hora de la mañana, su presidente, Manuel Fernández, explicó que los viticultores habían descargado en las tolvas unos 3.000 kilos de godello y mencía.La uva podrá seguir entrando durante el fin de semana, aunque si la lluvia persiste, la junta rectora fijará un nuevo calendario de vendimia el próximo lunes.

Los socios de la bodega cooperativa Virgen de las Viñas de A Rúa, que comenzaron la vendimia el pasado martes, también ralentizaron la recogida de uva debido a la borrasca.

En O Ribeiro, la vendimia prácticamente aún no ha empezado, excepto en algunas zonas puntuales en las que la uva está más madura, la previsión es que arranque con fuerza a mediados de la próxima semana. El presidente del Consello Regulador, Pablo Vidal, insiste en que, 'salvo que la lluvia se prolongue durante días, no tiene por qué afectar negativamente'.

Manuel Rodríguez, presidente de la denominación Ribeira Sacra, coincidía en que 'esta agua no supone ningún problema, otra cosa es que la invernía dure varios días, pero las previsiones apuntan a que mejorará el tiempo en la próxima semana, que es cuando empezaremos la vendimia en esta zona'. En Monterrei se ha paralizado la vendimia que había empezado el pasado martes, porque las bodegas prefieren esperar a recoger la uva cuando esté seca.

La lluvia obligó también a emplearse a fondo a la Policía Local de Ourense, que recibió numerosas llamadas por percances como la salida de tapas de alcantarillas y atascos de sumideros. Así, en el cruce del Puente Nuevo con Alfredo Brañas tuvo que cortar el tráfico durante media hora -pasadas las 11 de la mañana- por este motivo. Los agentes también tuvieron que actuar en Río Mao, Río Camba, Rodríguez Castelao, Marcelo Macías y la avenida de Portugal, entre otras. Los bomberos tuvieron que retirar una bajante de agua a la calle Serra de Queixa.

La lluvia ocasionó también salidas de vías en Santa Baia (Pereiro), en Allariz y un atropello a una mujer de 64 años en Otero Pedrayo de la ciudad. Además, un vehículo chocó contra una farola y ésta cayó a la vía, en la Costiña de Canedo, sin heridos. Protección Civil tuvo que achicar agua de varios bajos de Carballiño y Dacón (Maside), así como rescatar un coche estancado en una balsa de agua en la avenida del Arenteiro. Pero el suceso más impactante se produjo en Oseira, donde un tornado arrancó varios árboles y el tejado de una granja abandonada.

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