Los vendedores ambulantes de Xinzo han tomado el relevo de la hostelería a la hora de reivindicar su trabajo y su necesidad de volver a la actividad cuanto antes, sobre todo, después de que Sanidade relajase las medidas restrictivas en la villa limiana.
Pese a que este sábado la hostelería ampliaba su horario de apertura y el comercio local continuaba con su labor habitual, el colectivo de vendedores ambulantes no podrá volver a sus puestos el próximo lunes, fecha en la que tendría que tener lugar una de las ferias del mes en Xinzo, y es que el Concello comunicaba a última hora del viernes su decisión de no autorizar, todavía, la celebración de los dos mercadillos mensuales-se estudiará la posibilidad, no obstante, de reactivarlos el próximo 27 de diciembre-. "Enterámonos polo Facebook. Cando se suspenderon as feiras, a finais do verán, chamáronnos un a un. A actividade comercial non estaba suspendida en ningún municipio de Galicia e a feira non a prohibe ningunha autoridade sanitaria, son os concellos", precisa Iago Vázquez, portavoz de la Asociación Galega de Ambulantes e Autónomos. "Dende a asociación apelamos á responsabilidade política. Mentres estén abertas as tendas nós podemos traballar igual, con unhas medidas ou con outras. O que ten que facer o Concello é poñer as que estime oportunas, pero non prohibirnos o dereito a traballar", añade el portavoz del colectivo, quien lamenta que "estase asociando feira con virus, e iso non é certo. Estamos ao aire libre; de feito, as autoridades sanitarias están recomendando que se fagan as actividades que se poidan ao aire libre e en Xinzo, de feito, cumprimos todas as medidas de separación e seguridade. A feira non é ocio, é unha actividade comercial".
Marli González, portavoz de la Comisión de vendedores de la feria de Xinzo, añadió que el colectivo "síntese discriminado. Non temos os mesmos dereitos que un local sedentario. Se esto segue así, a xente vai a perder a costume de ir á feira. Soamente queremos traballar".
La regidora de Xinzo, Elvira Lama, por su parte, explicó que la decisión se tomó "en base a las recomendaciones del comité científico que, aunque nos permite hacer la feria, ésta tendría que ser al 50 por ciento con preferencia a productos de alimentación y esenciales, con lo cual, se reduciría más el número de puestos. No nos parece adecuado tener que elegir quien se pone y quien no", lamentó Lama. "Habría que hacer un sorteo. Además, consideramos que es prematuro. Los feriantes tienen que entender que tenemos alrededor de Xinzo de Limia situaciones muy complicadas", añadió.
