Los trabajos fueron ordenados por el último corregidor real de la villa, Julián Toubes Salgado

Un historiador de Xinzo revela una ignorada desecación de la laguna de Antela en 1830

Panorámica de la antigua laguna de Antela, antes de su desecación definitiva en 1958. (Foto: Archivo)
La historia de A Limia guarda múltiples sorpresas. Una de ellas, recogida por un historiador de Xinzo, es la trayectoria del último corregidor de la villa, Julián Toubes, el impulsor de la desconocida desecación parcial de la laguna de Antela, en 1830.
El redescubrimiento de la historia de A Limia durante los últimos siglos revela detalles insólitos, desconocidos para la mayoría de los 30.000 habitantes de la comarca limiana. Recientemente, esa revisión histórica supuso un homenaje en Xinzo a los 400 muertos durante la batalla de hace 200 años contra las tropas de invasión francesas.

El historiador Edelmiro Martínez Cerredelo revela en un libro la labor del último corregidor de la villa, Julián Toubes Salgado, el impulsor de la hasta ahora prácticamente desconocida desecación parcial de la laguna de Antela en 1830.

Toubes, natural de Vilela (Verín) y máxima autoridad civil y judicial de lo que es hoy el municipio de Xinzo, fue el último de una estirpe de corregidores limianos, iniciada con los Reyes Católicos en el siglo XV y concluida en 1835, con el cese del impulsor de una obra de drenaje parcial de la laguna, que ocupaba 42 kilómetros cuadrados y anegaba zonas de siete municipios antelanos.

Según Martínez Cerredelo, Toubes consiguió poner en marcha unos trabajos que duraron casi un lustro y que ‘costaron una cifra elevadísima para la época, 428.000 reales’.

Tras un trabajo de recopilación histórica de un año, Cerredelo destaca que Toubes desecó parcialmente la laguna (un trabajo que no fue retomado y concluido hasta el año 1958), con la intención de crear nuevos terrenos de labradío.

Un mandatario pionero que diseñó la Praza Maior

El texto de Martínez Cerredelo, que será presentado el próximo viernes en la Casa da Cultura de Xinzo, está basado parcialmente en los propios escritos enviados en el siglo XIX por Toubes a la reina Isabel II. Según el historiador antelano, la trascendencia del último corregidor limiano, un hombre erudito que acabó su trayectoria como juez en diversos lugares de España, no viene dada sólo por el drenaje y la canalización parcial de la antigua laguna, sino que ‘ordenó la realización de obras como la actual Praza Maior de Xinzo o la carretera entre Xinzo y Verín’. El trabajo de drenaje de A Lagoa, que quedó inconcluso tras el cese de Toubes, en 1835 y que afectó a unas 3.000 hectáreas, supuso también el fin de las habituales inundaciones que padecían las aldeas de la comarca limiana por la crecida de las aguas de la laguna.

El libro de Cerredelo es editado por la asociación cultural ‘Pedro González de Ulloa’. Esta agrupación pretende crear un futuro premio sobre investigación e historia de la comarca limiana, al igual que ya hacen entidades como el Instituto de estudios de Valdeorras o la asociación Chamoso Lamas, en Carballiño.

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