Allariz

Allariz retoma la Festa do Boi con casi 50 actividades

Allariz. 29-05-16. Provincia. Festa do Boi en Allariz.
Foto: Xesús Fariñas
photo_camera Allariz. 29-05-16. Provincia. Festa do Boi en Allariz. Foto: Xesús Fariñas
La celebración no se había podido celebrar con normalidad desde 2019 por culpa del coronavirus

Allariz ya le ve los cuernos al boi. El Concello y la Asociación Cultural Xan de Arzúa anuncian que el próximo mes de junio volverá la mítica Festa do Boi a las calles con cerca de 50 actividades.

El municipio recupera esta fiesta que no se había podido celebrar con normalidad desde el 2019 por culpa del covid. Ahora, con una situación más favorable, música, teatro, actividades infantiles, encuentros populares y, por supuesto, el famoso boi ocuparán la agenda durante nueve días.

La celebración arrancará el 11 de junio y se extenderá hasta el día 19 con salidas a cada jornada. La Asociación Cultural Xan de Arzúa apuesta una vez más por potenciar el carácter cultural e histórico de esta fiesta que forma parte del ADN de Allariz. Y, para ello, ofrecerá procesiones medievales en las que participarán más de veinte gremios, entre otros alicientes. De hecho, han anunciado que cerca de 500 personas ataviadas con con trajes tradicionales representarán lúdicamente el origen de la fiesta.

También hay programadas actividades para los más pequeños y pequeñas, una cena popular y, como no podía ser de otra manera, numerosas salidas do boi: doce en total a lo largo de los nueve días, que serán anunciadas con seis bombas.

La organización pide seguir las recomendaciones para vivir esta experiencia con la máxima seguridad. No tocar a los bois, prestar atención a los movimientos del animal, extremar la precaución con los más pequeños y acudir a los dispositivos de emergencia en caso de necesidad.

Origen

A Festa do Boi se remonta al siglo XIV, cuando en la villa de Allariz vivía extramuros una numerosa población judía. Durante las celebraciones del Corpus, la comunidad católica sacaba al Santísimo en procesión por, entre otros lugares, el barrio de Santo Estevo, donde era mayoría la otra confesión. En estos encuentros, judíos y católicos se enfrentaban hasta que a Xan de Arzúa se le ocurrió encabezar la procesión con un boi que espantaba a cornadas a quienes protestaban. Aunque la celebración se vio paralizada durante algunos episodios de su historia, se mantiene cada vez más viva en el corazón de Allariz.

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