El mercurio alaricano marcaba, a las 10,00 horas de este domingo, cero grados. Sin embargo, cuando se trata de fe, el frío no detiene a los fieles.
Ayer había mucho que celebrar en Allariz, pero, sobre todo, mucho que agradecer. Tal y como recordó Adrián Rodríguez, párroco de la villa, el año pasado por estas fechas y a causa de la pandemia del covid-19, no se pudo rendir homenaje a San Benito en uno de sus dos días grandes (el otro se conmemora el 11 de julio). En esta ocasión, aunque sin bombas y con menos eucaristías que de costumbre -se celebraron tres: a las 10,00 horas, a las 12,00 horas y a las 19,00 horas- los fieles alaricanos reforzaron su fe en el santo, al que rezaron por todas las víctimas de la pandemia y por quienes la combatieron desde la primera línea, como los sanitarios."Ofrezcamos esta fiesta por todos los que han sufrido las consecuencias del Coronavirus, por los enfermos, por los que han fallecido... Recordemos a todo el personal sanitario y tengámoslo en nuestro corazón", pedía a sus feligreses en el momento del sermón el párroco alaricano, quien, al mismo tiempo, destacaba la importancia de dar las gracias a Dios, por intercesión de San Benito, "por permitirnos celebrar esta fiesta, estar todos juntos. Somos de los pocos países de Europa que, actualmente, no están en un confinamiento. Debemos valorar la posibilidad de poder pedir y dar nuestras ofrendas a San Benito".
Un santo “milagreiro"
La gratitud hacia San Benito que se profesa en Allariz se puede leer en las placas que están ubicadas a la entrada de la iglesia que lleva su nombre. En algunos casos datan del año 1950 y reflejan "los favores" y las "curaciones" a los fieles, sobre todo, a la hora de hablar de enfermedades cutáneas. "Es un santo 'milagreiro' sobre todo para las verrugas y las manchas de la cara", apunta Fina, una de las fieles que, además, colabora en las tareas de la iglesia. "Yo tengo una hija que tenía muchas verrugas en la boca y se las quitó. Ya ves que tiene muchas placas, todas ellas son de gente que le está muy agradecida", añade.
El agradecimiento se puso de manifiesto con la afluencia de fieles a las tres misas programadas, una concurrencia, no obstante, mucho menor a la de años anteriores por la situación epidemiológica. En este sentido, el aforo estuvo limitado a 85 personas y se habilitó a los feligreses la tribuna superior. Además, al término de cada eucaristía se procedió a desinfectar los bancos y a ventilar, durante un periodo considerable, el interior del templo para cumplir con los protocolos sanitarios. Todo ello para poder homenajear, este año sí, a un santo que "siempre quiso ver a Jesús en las distintas etapas de su vida y lo logró en una vida de comunidad en los monasterios benedictinos", concluyó el párroco de Allariz, Adrián Rodríguez, que realizó una descripción de los hechos más importantes del Santo en su día grande.
Los fieles a San Benito
José Luis Álvarez: "Vengo siempre desde vigo, hice una promesa religiosa y tengo que cumplirla"
Mari Carmen Ferreiro Cid: "Soy devota de toda la vida a san benito, es el patrón de Allariz y es nuestro santo preferido"
Marian Pérez: "La devoción me viene de familia, mi padre era devoto y mi madre echaba las bombas en la fiesta de San Benito"
