Resolución de conflictos, sexualidad, ocio en familia, habilidades para mejorar la comunicación familiar o la autoestima son algunos de los puntos que conforman el temario de 'A orella verde', la escuela de familias impulsada desde el Ayuntamiento de Allariz para incentivar la formación continua y reflexión de aspectos educativos que interesan a las familias.
Una veintena de mujeres alaricanas retomaba el miércoles las clases en el Fogar do Maior con el objetivo de 'hablar de nuestras dudas y preocupaciones, además de compartir experiencias y conocimientos', apuntaba Lucía Babarro, una de las madres veteranas.
Palabras que ratificaba la técnica local, Lola Serrano, que explicaba que una sociedad en constante evolución y el deseo de poder educar a los hijos en una libertad responsable 'provocan en los padres una necesidad de obtener información y análisis crítico del mundo actual, de adquirir herramientas nuevas para hacer frente a esta realidad y poder llevarlas a cabo' y añadía que 'los cambios también se dan en las propias madres, que demandan estar bien consigo misma y necesitan un espacio para ellas, para crecer y disfrutar' de la maternidad.
La iniciativa, que cada año incrementa la participación de las familias, tiene como reto para este curso 2011/2012 'lograr una mayor implicación por parte de los padres ya que aunque acuden puntualmente a alguna actividad no lo hacen de manera continuada', reconocía la técnica local. Entre las novedades de este curso, Serrano destacaba dos talleres dedicados a la negociación con adolescentes y creación de juguetes reciclados en colaboración con el grupo de mayores, así como 'un servicio de guardería donde un hijo adolescente del grupo se encarga del cuidado de los pequeños que acuden con sus madres', matizaba.
Palabras que ratificaba la técnica local, Lola Serrano, que explicaba que una sociedad en constante evolución y el deseo de poder educar a los hijos en una libertad responsable 'provocan en los padres una necesidad de obtener información y análisis crítico del mundo actual, de adquirir herramientas nuevas para hacer frente a esta realidad y poder llevarlas a cabo' y añadía que 'los cambios también se dan en las propias madres, que demandan estar bien consigo misma y necesitan un espacio para ellas, para crecer y disfrutar' de la maternidad.
La iniciativa, que cada año incrementa la participación de las familias, tiene como reto para este curso 2011/2012 'lograr una mayor implicación por parte de los padres ya que aunque acuden puntualmente a alguna actividad no lo hacen de manera continuada', reconocía la técnica local. Entre las novedades de este curso, Serrano destacaba dos talleres dedicados a la negociación con adolescentes y creación de juguetes reciclados en colaboración con el grupo de mayores, así como 'un servicio de guardería donde un hijo adolescente del grupo se encarga del cuidado de los pequeños que acuden con sus madres', matizaba.
