Turismo

Un ecomuseo del pan completa la oferta etnográfica en Puxedo

Vista aérea de la Aira da Carballa en Puxedo, dentro de la ruta etnográfica.
photo_camera Vista aérea de la Aira da Carballa en Puxedo, dentro de la ruta etnográfica.
Los vecinos acaban de restaurar siete hórreos y ultiman la señalización de una ruta con códigos QR

Una media de cincuenta personas se ha pasado cada día por los caminos y "airas" rehabilitadas de Puxedo. A sus 700 metros de altitud, la aldea de montaña de Lobios se ha convertido en uno de los atractivos del Parque Natural Baixa Limia-Serra do Xurés, por el encanto de su paisaje y también por la labor de recuperación y rehabilitación llevada a cabo en los espacios comunes y en los elementos etnográficos de un pueblo tradicionalmente ligado a la agricultura. 

"Claramente tenemos más visitantes que antes de la pandemia, y eso que no contabilizamos los que vienen al río y no pasan por el pueblo, que serán otro tanto. La gente busca lugares poco masificados y actividades al aire libre y alojamientos no compartidas como los que tenemos aquí. Algunos ya optaron por comprar casas y restaurarla para convertirse en un vecino más", relata Pablo Rodríguez, portavoz y coordinador del plan vecinal desarrollado desde hace una década en Puxedo y reconocido con el "Premio Agader 2020", quien matizó que "cuando la frontera está abierta, también tenemos mucho turismo portugués".

Los últimos elementos en incorporarse al museo al aire libre en torno al ciclo del pan en el que se ha convertido la aldea han sido siete canastros, alguno tan significativo como el de A Laxeira y el de Eira Vella, previo acuerdo con los propietarios. "Actualmente 16 de los 28 hórreos existentes están rehabilitados", apunta Rodríguez Paz quien recordaba la recuperación de tres de las cuatro "airas de mallar" enlosadas en piedra de granito, seis de los ocho molinos ubicados en el río Mao y también un nuevo horno comunitario después que el original se vendiese en los sesenta para costear la construcción de la carretera de acceso al pueblo.

Visita autoguiada

Con el ánimo de fomentar y facilitar la visita al pueblo, se está procediendo a señalizar todo el trazado de la ruta con paneles interpretativos con códigos QR, de manera que los turistas puedan descargar en sus dispositivos móviles toda la información y realizar una visita autoguiada. "Asimismo, se ha recuperado una antigua palleira en la entrada del pueblo, al lado de la Eira do Toco, la cual servirá como centro de recepción de visitantes y contará con paneles y videos explicativos del ciclo del pan", señalaba Pablo Rodríguez. 

Con la puesta en valor de todo este patrimonio, además de mantener la herencia de sus antepasados, los vecinos pretenden incrementar el atractivo turístico del Parque do Xurés "al no existir en Galicia ningún otro ecomuseo de estas características", apuntaba Rodríguez.

A estas intervenciones sobre el patrimonio, hay que añadir al trabajo desarrollado en la aldea para la erradicación del feísmo con murales de Mon Devane y actividades lúdicas relacionadas con el propio ciclo del pan, fiestas populares, jornadas de voluntariado y mismo de pintura rápida.

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