Los señores Zapatero y Rajoy se reúnen en la Moncloa y uno imagina que, al ser los dos representantes de la inmensa mayoría de los votantes, que pensarán en los más de cuatro millones y medio de desempleados, en los muchos miles de familias a los que los bancos les están quitando sus viviendas, en las miles de empresas que han tenido que cerrar, en las familias que ya no llegan no a fin de mes, sino ni a mediados de mes.
Pensé que estos dos señores se harían eco del clamor popular y dejarían parte de sus aspiraciones personales o partidistas y se pondrían manos a la obra, aportando acuerdos que después en el parlamento se convirtiesen en leyes, para intentar, conjuntamente, una salida a esta situación que yo me atrevo a denominar como de ¡emergencia nacional!, pero no, aquí, a estos dos señores los ciudadanos al parecer les importamos una ¡M!
El señor Zapatero se ha visto que es incapaz de solucionar la gran crisis que padecemos y el señor Rajoy lo único que le interesa es llegar a gobernar. Llegaron a dos acuerdos: a mantener la jubilación privilegiada de los señores diputados y a privatizar las cajas de ahorros, dos medidas importantes para los cuatro millones y medio de parados.
Hasta José Mercé ha declarado: No entiendo que con tanto parado estemos tan impasibles, tan quietos. Señor Mercé, con estos gobernantes, el que está y el que estará, ¿qué podemos esperar? Y si a eso le añadimos a los dos sindicatos, CC.OO. y UGT, que en teoría tendrían que ser los que movilizasen a los trabajadores, no lo hacen, porque estos dos sindicatos están cogidos por los webs con las subvenciones que reciben, tanto del Gobierno central como de los autónomos, pues ¿quién va a dirigir la orquesta de las protestas o movilizaciones?
El señor Zapatero se ha visto que es incapaz de solucionar la gran crisis que padecemos y el señor Rajoy lo único que le interesa es llegar a gobernar. Llegaron a dos acuerdos: a mantener la jubilación privilegiada de los señores diputados y a privatizar las cajas de ahorros, dos medidas importantes para los cuatro millones y medio de parados.
Hasta José Mercé ha declarado: No entiendo que con tanto parado estemos tan impasibles, tan quietos. Señor Mercé, con estos gobernantes, el que está y el que estará, ¿qué podemos esperar? Y si a eso le añadimos a los dos sindicatos, CC.OO. y UGT, que en teoría tendrían que ser los que movilizasen a los trabajadores, no lo hacen, porque estos dos sindicatos están cogidos por los webs con las subvenciones que reciben, tanto del Gobierno central como de los autónomos, pues ¿quién va a dirigir la orquesta de las protestas o movilizaciones?
